Elías, no entiendo la diferencia que haces entre valor y valoración (lo más valioso frente a lo más valorado).
Entiendo que llamas valoración al valor que la dichosa ley asigna a las cosas (pues dicho valor depende de la valoración que, como sociedad, hagamos).
¿Qué es para ti el valor, entonces?
Dices que el proceso de valoración no es un mero acto subjetivo. Yo creo que sí, solo que tenemos el condicionante del mercado, la publicidad, que nos dice el valor aproximado de las cosas. ¿Cuánto vale una tele 3D de 50 pulgadas? Yo no quiero una ni regalada, pero supongo que estarán sobre los 700 euros, 200 arriba o abajo. Ahora, que sabiendo esto, igual la puedo vender por 300 o 400 sin mucho esfuerzo. Mi valoración de la tele está sujeta a sus propiedades reales en tanto dichas propiedades me permitan sacar un beneficio (a través de una reventa). Sin un mercado, sin una moneda con un pretendido valor objetivo, sin unas ciertas garantías de que podré cambiarla por algo más útil (más valioso, a mi juicio), esa tele para mí no vale nada. Pero, ¿quién me va a aceptar una tele a cambio de otra cosa más valiosa? El valor objetivo de las cosas cae por su propio peso.
Abulafia escribió:
Entiendo que se puede extender lo mismo al caso económico. Superponer un criterio moral a una ley natural, y, si es posible, modificar las consecuencias que impone dicha ley para cumplir con el precepto moral, hacerlo así.
¿Y cómo vas a modificar las consecuencias que impone la ley de la oferta y la demanda? ¿Cómo vas a cambiar que la gente esté dispuesta a pagar más por las cosas que más desea, y que los comerciantes quieran sacar el máximo beneficio de cada transacción? Como no lo hagas a base de legislación draconiana, no lo creo posible.