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TEMA: ¿Nacimiento y muerte en Empédocles?

¿Nacimiento y muerte en Empédocles? 24 Jul 2019 14:50 #50830

  • blancarboleya
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Estoy estudiándome esta asignatura con la ayuda de diversos manuales y a veces no sé si tanta profundización me ayuda o no, pues encuentro afirmaciones que me parecen contradictorias entre los diferentes autores y no sé a qué atenerme...

En el caso de Empédocles, tanto en el manual de Fraile como en Reale se habla de que no hay ni nacimiento ni muerte, sino mezclas y disoluciones de determinadas sustancias que permanecen eternamente iguales e indestructibles (agua, aire, tierra y fuego) dentro de un proceso de cambio cíclico (ese continuo unirse y separarse producto de las fuerzas del Amor y Odio).
Sin embargo, Copleston dice (cito textualmente): <<Empédocles trata de conseguir esta conciliación mediante el principio de que los objetos comienzan a ser y dejan de ser -como nos lo muestra la experiencia-, pero están compestos de partículas materiales que son en sí mismas indestructibles. [...] Asi, los objetos se originan de la mezcla de los elementos, y dejan de ser cuando estos elementos se separan; pero los elementos mismos ni comienzan a ser ni perecen, sino que permanecen siempre inmutables>>.
Entiendo, pues, que para Copleston sí que hay nacimiento y muerte en Empédocles, pero por parte de los objetos creados a raíz de la separación y mezcla de los elementos, mientras que Reale y Fraile no conciben este juntarse y disgregarse como el comienzo y el fin de las cosas.

Luego, por otra parte, Fraile escribe que, al comienzo, <<en el predominio del Amor, los elementos se mantienen unidos y mezclados dentro del Ser (uno, eterno, imperecedero, finito, limitado, inmóvil, homogéneo, sin distinción de partes ni vacío interior, redondo y compacto como una Esfera)>>. Pero, si estos elementos están dentro del Ser y atribuimos a dicho ser las propiedades de Parménides, ¿no habría movimiento y, por tanto, cambio en este Ser al separarse y volverse a unir los elementos?
Reale expresa esto mismo de una forma que quizás a mí me parece más acertada o, al menos, no tan confusa, defendiendo que <<cuando prevalece el Amor, el predominio total de esta fuerza hace que los elementos se junten para formar una unidad compacta que Empédocles denomina Uno o Esfera>>. No se equipara, en principio, este Uno con el Ser de Parménides.

Quizás estas dudas son producto de un uso diferente del lenguaje y realmente todos los manuales te están viniendo a decir lo mismo (lo cual es muy probable), pero en este caso no sé cómo ordenar y darle un sentido unitario a tanta teoría. ¿Podríais echarme una mano?
«Viva usted ahora las preguntas»

Rainer Maria Rilke.
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¿Nacimiento y muerte en Empédocles? 24 Jul 2019 20:00 #50837

  • elías
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Hola Blancarboleya

Simplemente querría darte mi opinión.

Empédocles, junto con Anaxágoras y Demócrito, caerían dentro del “Modelo Pluralista” de explicación racional de los presocráticos. No son monistas (Tales, Anaximandro, etc) porque parten de una pluralidad de principios originarios. En el caso de Empédocles son cuatro (Tierra, Agua, Aire y Fuego), en el caso de Anaxágoras una cantidad infinita (homeomerías o semillas) y en el caso de Demócrito multitud (átomos).

En el caso de Empédocles y Anaxágoras esos elementos poseen propiedades cualitativas mientras que en el caso de Demócrito sólo poseen propiedades cuantitativas (forma, posición y número). Por ello se considera a Empédocles un pluralista cualitativo limitado, a Anaxágoras un pluralista cualitativo ilimitado y a Demócrito pluralista cuantitativo.

Hay que recordar que la idea que imperaba en los pensadores presocráticos era el hilozoísmo, es decir, que la materia es activa y viviente, y por tanto, se mueve por sí misma (constitutivamente da de sí). Pero justamente, y tanto Anaxágoras como Empédocles, no defienden el hilozoísmo. Por tanto, y para explicar el movimiento, deben de postular la existencia de unos principios extrínsecos a la materia. En el caso de Empédocles postula dos fuerzas (Amor o Concordia y Odio o Discordia) y en el caso de Anaxágoras la indiferencia de las homeomerías era ordenada por el Nous. Resumiendo: para explicar la realidad, tanto Empédocles como Anaxágoras, postulan la existencia de unos elementos junto con unos principios de movimiento (obviamente, extrínsecos a la materia).

Igualmente recordar que los presocráticos eran materialistas ( pero no en sentido moderno). En realidad se les denomina materialistas abstractos. Por tanto, ese Nous, por ejemplo, no era espiritual sino que seguía siendo material. Esa materia sería todo lo sutil que se quiera, hiper-sutil si se desea, pero material al fin y al cabo. Fue obra del cristianismo distinguir entre materia y espíritu aunque Anaxágoras estuvo muy cerca.

¿Qué es lo que animaba a Empédocles?

Pues tratar de conciliar a Parménides con Heráclito. Parménides, y al postular el Ser, tuvo que negar todo movimiento. Empédocles, como Anaxágoras y Demócrito, trataban de salvar tanto el ser de Parménides como el fluir de Heráclito. Y para ello lo que hicieron fue postular una serie de elementos que poseían las características del Ser de Parménides, como son los cuatro elementos en Empédocles, los átomos en Demócrito y las homeomerías en Anaxágoras (todos ellos con las características del ser de Parménides) y a la vez postular la existencia del movimiento ya sea postulando la existencia del vacío en el caso de Demócrito (vacío que negaba Parménides) o postulando unos principios de movimiento (Nous, amor y odio).

Personalmente considero que Fraile, Reale y Copleston están diciendo lo mismo. Es decir, lo que verdaderamente “es” son los cuatro elementos, las homeomerías y los átomos, y éstos, ni nacen ni perecen, porque simplemente “son”. No pueden “nacer” porque ello implicaría el paso del no-ser al ser ( y ello es impensable según Parménides) como no pueden “morir” porque ello supondría el paso del ser al no-ser ( igual de impensable).

Por ello: “En el caso de Empédocles, tanto en el manual de Fraile como en Reale se habla de que no hay ni nacimiento ni muerte, sino mezclas y disoluciones de determinadas sustancias que permanecen eternamente iguales e indestructibles (agua, aire, tierra y fuego) dentro de un proceso de cambio cíclico (ese continuo unirse y separarse producto de las fuerzas del Amor y Odio)”. O en el caso de Copleston: “<<Empédocles trata de conseguir esta conciliación mediante el principio de que los objetos comienzan a ser y dejan de ser -como nos lo muestra la experiencia-, pero están compuestos de partículas materiales que son en sí mismas indestructibles. [...] Asi, los objetos se originan de la mezcla de los elementos, y dejan de ser cuando estos elementos se separan; pero los elementos mismos ni comienzan a ser ni perecen, sino que permanecen siempre inmutables>>.

Dices: “Reale expresa esto mismo de una forma que quizás a mí me parece más acertada o, al menos, no tan confusa, defendiendo que <<cuando prevalece el Amor, el predominio total de esta fuerza hace que los elementos se junten para formar una unidad compacta que Empédocles denomina Uno o Esfera>>. No se equipara, en principio, este Uno con el Ser de Parménides.”

Sí, efectivamente, así también lo pienso yo. Ahora bien, si lo único que imperase fuese el Amor entonces habría Unidad pero no habría mundo y si lo único que imperase fuese la Discordia entonces habría multiplicidad absoluta (Caos) pero tampoco habría mundo. Por eso Empédocles consideraba que el Mundo se “formaba” no cuando imperaba únicamente el Amor ( porque sólo habría Unidad pero no diversidad o pluralidad) ni tampoco cuando imperase el Odio ( porque entonces sólo habría Caos) sino que el mundo se daba en el transito de la una a la otra, es decir, teniendo que estar presentes ambos principios a la vez. Por tanto, para que existe el Mundo es tan necesario el Odio o Discordia como el Amor o Concordia.

Un saludo.
Última Edición: 24 Jul 2019 20:08 por elías.
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¿Nacimiento y muerte en Empédocles? 25 Jul 2019 18:38 #50861

  • Onofre
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[Nietzsche, F., La filosofía en la época trágica de los griegos, Valdemar, 2004.]

Desde el punto de vista de Nietzsche, la verdad de Empédocles gira en torno de la idea de que «todo lo vivo es uno», es decir, «dioses y hombres y animales son uno en tanto que seres vivos». Por tanto, este filósofo aboga por una suerte de unidad de la vida: «La unidad de la vida es el pensamiento de Parménides sobre la unidad del ser, pero formulado de una manera incomparablemente más productiva […]». Nietzsche muestra desde su vitalismo una inclinación por Empédocles y una alergia a la doctrina del gélido Parménides cuyo ser inmóvil y eterno es considerado por el filósofo alemán como «un concepto vacío que no dice nada». Empédocles expresa con esa unidad de lo vivo un fuerte sentimiento íntimo de comunidad con la Totalidad de la Naturaleza, esto es, un profundo «sentimiento de compasión hacia todo lo vivo». El pensamiento fundamental del filósofo griego consiste «en conducir a los hombres más allá, hasta alcanzar la κοινὰ τῶν φίλον [comunidad de amigos] de los pitagóricos, esto es, una reforma social con abolición de la propiedad».
La existencia en este mundo es vista por Empédocles como una consecuencia de una culpa, pues la tierra es para él una caverna oscura, un «prado de la fatalidad» sometida a la discordia y el sufrimiento. Sólo hay un principio que garantiza el orden en este mundo tan problemático, a saber, Afrodita: «Para Empédocles, la vida sexual es la mejor y más noble de las cosas, el mayor antídoto contra la tendencia a la división». En definitiva, en este mundo entran en combate la Discordia (Νεῖκος) y el Amor (Φιλια), siendo este par antagónico el principio motor que mueve todo lo que es, es decir, algo así como el Nous de Anaxágoras en cuanto al origen del movimiento se refiere. La lucha que se da entre la Discordia y el Amor también guarda cierto paralelismo con el Πόλεμος de Heráclito en el sentido de que «la guerra es el padre y el rey de todas las cosas […]».

Saludos,

OC.
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¿Nacimiento y muerte en Empédocles? 27 Jul 2019 11:45 #50913

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Hola, blancarboleya:

No hay nacimiento ni muerte en Empédocles.

Escribe Nietzsche:
«En el σφαΐρος [esfero] dominaba originariamente la armonía y el reposo; luego comenzó a agitarse y todo comenzó a separarse [por la acción de Amor y Odio].»
«Éstas son las fuerzas del movimiento. Pero aquello que es movido son los οντά [entes] según la idea de Parménides: inengendrados, indestructibles, invariables.»
(Las citas pertenecen a Los filósofos preplatónicos, de Nietzsche [Editorial Trotta, 2003]. Ahora sólo dispongo de una edición digital no paginada, por lo que no puedo remitirte a la página correspondiente de la cita.)

Sigue Nietzsche:
«Empédocles sólo halla cuatro realidades verdaderas, es decir, cuatro cualidades y sus mezclas: Tierra, Fuego, Agua y Aire. [...] Estas cuatro materias principales contienen en sí toda la materia; ésta no puede ni aumentar ni disminuir. La física las ha conservado durante más de dos mil años. Todas las combinaciones entre estas materias originarias no afectan a sus cualidades: las mezclas ocurren sólo porque las partes de un cuerpo penetran en los intersticios de las partes de otro, sin que el uno se transforme en el otro. La mezcla más completa también se basa en una amalgama de pequeñas partes. Y al revés: cuando un cuerpo surge de otro, no se transforma el uno en otro, sino que sus materias abandonan su antigua conexión. Si dos cuerpos están separados entre sí por su sustancia y, sin embargo, actúan el uno sobre el otro, esto sólo sucede por el desprendimiento de pequeñas partículas invisibles que penetran en las aberturas del otro. [...] Así, Empédocles dice que lo similar y lo fácil de mezclar son amigos; lo igual anhela lo igual. Lo que no puede mezclarse es enemigo. Pero el auténtico principio motor continúa siendo siempre la φιλία [amor] y el νεΐκος [odio], es decir, existe una relación necesaria entre sus efectos y la forma de las cosas. Las materias deben estar mezcladas y formadas de tal modo que sean parecidas y se correspondan; entonces se les añade la φιλία».


En relación con la segunda duda, en efecto, el Esfero de Empédocles no tiene las mismas características que el ser de Parménides. El ἀρχή de Empédocles es dinámico. Empédocles establece que también el νεῖκος es un ἀρχή, no sólo φιλία. Hay períodos de la historia del ser en los que hay ἀλήθεια y otros, en los que no. Φιλία debe superar el reino de νεῖκος, que es antítesis, principio de disgregación.

Escribe Nietzsche:
«Empédocles ha instaurado la φιλία [amor] y el νεΐκος [odio], más concretos, en lugar del νους, más abstracto. Por lo demás, Empédocles supera cualquier mecanicismo del movimiento; mientras que Anaxágoras atribuía el principio del movimiento al νους y comprendía los movimientos sucesivos como efectos indirectos. Esto era algo consecuente. En efecto, ¿cómo un ov [ente] inmóvil podría influir sobre otro öv inmóvil? No hay una explicación mecánica del movimiento, sino tan sólo una explicación mediante impulso y animación. Sólo éstos mueven; por lo tanto, no lo hacen de golpe, sino progresivamente y en todos sitios. Ahora bien, su problema principal es hacer surgir un mundo ordenado a partir de esos impulsos contrapuestos, sin cualquier fin, sin cualquier νους. Y aquí le basta la gran idea de que, entre las innumerables malformaciones y formas imposibles de la vida, surjan también determinadas formas adecuadas y aptas para la vida; la adecuabilidad de lo existente remite aquí a la existencia de lo adecuado. Los sistemas materialistas no han superado nunca esta idea. Actualmente disponemos de una aplicación especial en la teoría darwiniana. Así, pues, en las uniones, el amor no procede por adecuabilidad, sino sólo por mera unificación. [...] Éstas son las fuerzas del movimiento. Pero aquello que es movido son los οντά [entes] según la idea de Parménides: inengendrados, indestructibles, invariables. [...] Todos los movimientos, surgen, por tanto, según Empédocles, de manera no mecánica, si bien conducen a un resultado mecánico: extraña amalgama de intuiciones materialistas e idealistas».

Un saludo.
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