Hola, Alelo334
Sí, efectivamente, confesar es expresar voluntariamente una idea. La cuestión es lo que se entienda, o deba de entenderse, por ese “ex-presar” o cuándo podemos decir que uno verdaderamente se está expresando o confesando. Porque expresarse verdaderamente, y en el caso que nos ocupa, es dar las razones y los motivos de aquello que se quiere manifestar o confesar. Es que expresarse es exponerse, explicarse. Por tanto, cuanto más se exprese uno, cuanto más se explique uno, más se confiesa.
Sí, puede que una confesión, en tanto que expresa una idea, sea el decir: “Confieso que no es igual, es preferible sin conocimientos universitarios previos, pero hay que acercarse en cualquiera de los casos.” Pero la verdadera confesión, el expresarse verdaderamente, tal y como yo lo veo, es algo más que realizar una mera afirmación de aquello que pienso, creo, siento o confieso. Y ese más es dar las verdaderas razones o motivos de aquello confesado, sentido, creído o pensado.
Sí, yo puedo confesar que he cometido un crimen. Pero qué verdadera confesión sería aquella que no diera los verdaderos motivos o que no diera las verdaderas razones por las cuales cometí dicho crimen.
O si se quiere, podría hablarse de dos tipos de confesiones, a saber, una impersonal y la otra personal. Aquella sería en la que uno se limita a realizar una mera afirmación sin dar los verdaderos motivos que le llevan a uno a realizar dicha afirmación mientras que ésta, la personal, sería aquella en que uno, y por así decir, saca todo lo que lleva dentro.
Por cierto, lo que me resulta sumamente interesante de la definición de confesar es ese matiz de la voluntariedad. Efectivamente, una verdadera confesión o es voluntaria o no es propiamente una confesión. Porque decir aquello que no se pretende decir, ya sea porque uno se equivoca diciendo lo que no quería decir o ya sea porque a uno le arranquen la verdad a palos, no es una verdadera confesión. Sí, será verdad aquello que dice pero lo que no es verdad es que hubiera querido decir aquello que dijo. Sí, dijo la verdad, pero no la confesó.