Quisiera insertar aquí una consulta sobre el concepto de "totalización" en Sartre, concretamente tal como está expuesta en la "Crítica de la razón dialéctica". Cuando habla Sartre de "totalización"¿ hay que entenderla en el sentido hegeliano (tesis-antítesis-"totalización"? Y cuando se refiere a la historia como "totalización destotalizada" ¿se refiere a las diversas contradicciones "totalizadas" (o superadas) a través de las cuales discurre la historia pero sin una "totalización" última en el sentido de que tal totalización carece de teleología, esto es, está abierta, destotalizada? Sí es así, entiendo que la revisión del marxismo que hace aquí Sartre pondría duda la idea de que el marxismo sea un historicismo-determinismo. Gracias.

Creo que con la expresión "totalización destotalizada" se refiere Sartre a la acción erosiva de la libertad del hombre; porque el hombre está mediado por el mundo al igual que el mundo está mediado por el hombre. La libertad humana entra en contradicción no ya con la totalización en curso, que comprende esa actividad creadora, sino con la "totalidad", que es el todo irreductible (pero siempre postergado): la dialéctica no tiene fin, la totalización se "destotaliza" porque la historia no se culmina, pues la libertad humana, autoconstitución del sujeto a través de lo que este hace en el mundo, impele siempre en pos de nuevos propósitos. El movimiento de totalización es dual, genera una destotalización inmanente.

Decía Sartre que hoy puedo elegir matar a Pierre, pero que no soy para siempre jamás aquel que mató a Pierre, porque la libertad me impulsa a emprender otras cosas, a ejercer una actividad creadora ilimitada, la cual no permite cerrar o coronar la historia. La libertad, la praxis individual que empece para que la multiplicidad del grupo no pueda hacerse una en la unidad de la historia, es como la corriente que erosiona sin cesar la orilla de los ríos.

No acabo de encontrar dónde habla Sartre de la Historia como "totalización destotalizada". Desde luego, en muchos pasajes de "Crítica de la razón dialéctica" se refiere a la Historia como "totalización". Pero la duda está, si no lo entiendo mal, en añadir a esa totalización el calificativo de "destotalizada".

¿Podéis especificar con mayor precisión qué pasaje concreto estamos interpretando?

Hola, Nolano:

Hace años que no tengo conmigo la Crítica de la razón dialéctica, de modo que no puedo hacer una consulta directa.

Entre los glosadores de Sartre que tematizan o que simplemente citan de pasada el asunto de la totalización destotalizada, he encontrado menciones en estos tres:

Artículo [1], p. 18:
Artículo [2], p. 243:
Artículo [3], p. 49:

Gracias por la información, Boris.
Leeré con detenimiento el primero de los artículos que enlazas. Me interesa especialmente porque parece sostener la tesis de que Sartre en la Crítica de la razón dialéctica es antiteleológico, cuando la impresión que yo extraigo es justamente la contraria: que Sartre se refiere continuamente al "fin", al establecer la diferencia entre la razón dialéctica y la razón analítica, a la que aquella se supone que supera.
El segundo artículo, dado el pie de identificación de la autora de la reseña del libro de Celia Amorós, ni me molestaré en leerlo. Solo me interesan quienes hablan del y para el hombre en general, no solo de y para la mitad de la humanidad.

Hola, Nolano:

En las últimas líneas del primer artículo se puede leer:
A partir de estas premisas, Sartre extraía conclusiones aplicables a los grupos, a las clases o los géneros próximos, amén de a las formaciones ideológicas y políticas. Él afirmaba que el juramento es fundamental en una organización; no hay organización sin un juramento. "Pero lo notable del grupo es que está desintegrándose constantemente, porque está formado, en última instancia, por individuos libres. Ésta es su paradoja". Y, para caracterizar el obstáculo que supone la libertad individual en la creación de estructuras teleológicas cerradas, y para relativizar la potencia de todo juramento de adhesión, Sartre pone como ejemplo formidable el de un militante (creo recordar que bolchevique) al que le ordenan matar a un hombre: le dan la orden de matar, y él díce: "La orden me abandonó, y tres calles más adelante estuve solo".

Escribiste:
Cierto. De suyo sigo el mismo criterio; pero, en ocasiones, y para poner a prueba la buena salud de mis prejuicios, examino artefactos fabricados por artífices de dudosa filiación, y me llevo gratas sorpresas, como en el caso que de la recensión que nos ocupa.