Alma escribió:
Pero es que esto no sirve. Lo que nos asusta de la muerte es lo desconocido, y como no podemos conocerla hasta que nos muramos, pues... No creo que sea cuestión de librarse del miedo a la muerte a través del razonamiento, sino más bien, a través de la falta de él.
Yo diría que no podemos conocerla NI SIQUIERA cuando hayamos muerto, porque, bueno, en fin, difícil es
conocer algo sin estar vivo, o comparar la concepción real de la muerte con la que teníamos estando vivos. De ahí que la muerte sea literalmente incognoscible, irrepresentable, inimaginable, etc etc. Cuando "imaginamos" cualquier cosa atemporal (la muerte, la eternidad, 'Dios', los impuestos) le damos inevitablemente una forma que la temporaliza y por tanto la desvirtúa (y sí, eso es un poco 'teología negativa', será que tengo sobredosis de Medieval).