Hola, estuve mirando lo de la apariencia trascendental y encontré este artículo
www.diva-portal.org/smash/record.jsf?pid...3A813884&dswid=-2461 Os digo lo que entendí (o malentendí), para aclararme y por si a alguien le ayuda. Sigue bastante a Kant, a mí me vino bien (espero, creo) leerlo para familiarizarme más con la terminología.
La filosofía para Fink empieza con el asombro, la pregunta por lo conocido y lo desconocido, y sobre todo la pregunta por la base misma del conocimiento humano, el ser y la verdad. Sin embargo, la filosofía presupone unos conceptos de ser y verdad a la vez que los pone en cuestión. Así que la filosofía debe cuestionar el mismo acto de cuestionar, obtener conocimiento a la vez que pregunta qué es conocer. Esto es un bucle autorreferencial, la misma posibilidad de la reflexión filosófica se pone en cuestión.
Para Fink hay unos conceptos en la sombra que subyacen tras lo que se tematiza explícitamente. Los conceptos explícitos de la reflexión siempre están basados en conceptos que el filósofo no considera. Por ejemplo, al considerar el movimiento, el concepto de tiempo se retrae a las sombras pero no desaparece. Si en cambio nos centramos en el tiempo es el movimiento el que se retrae como una presuposición. Pasa algo similar con el ser de la Verdad y la verdad del Ser (por eso cuando Aristóteles investiga el ser por el ser Fink diría que se basa en una presuposición ingenua de lo que significa ser).
Lo que Fink pretende es sacar de las sombras a la luz del día la validez de la reflexión filosófica con esta paradoja que presenta de autofundamentarse.
A partir de esto el autor del artículo trata de dar una solución (en la que no entraré) y la hace con un repaso de conceptos kantianos que a mí al menos me ha venido muy bien:
La idea de la que parte es cómo Kant propone que es posible la orientación sin ninguna validez objetiva en la que basarse. Para orientarnos geográficamente la razón demanda una "diferencia subjetiva". Esta diferencia puramente subjetiva es "derecha" e "izquierda". Una vez tenemos esa diferencia subjetiva podemos orientarnos aunque no haya ninguna señal ni hito en el camino. Lo mismo pasa al orientarnos lógicamente. La razón tiene una necesidad subjetiva, requiere lo incondicionado, es inevitable, es una necesidad presupuesta por la conciencia en toda su experiencia.
Mientras que Fink considera la presuposición de conceptos algo que pone en cuestión la posibilidad de la reflexión filosófica, Kant considera que no solo es deseable presuponer ciertas ideas sino que es inevitable, forma parte de la naturaleza de la razón. Hay unas ciertas ideas que no ponen en cuestión la validez del conocimiento sino que le dan al pensamiento la base desde la que orientarse. Son las ideas trascendentales.
Las ideas trascendentales son conceptos de la razón pura que posibilitan la comprensión de la experiencia por parte del pensamiento. La necesidad subjetiva (como en el caso de izquierda-derecha) de estas ideas trascendentales es lo que fundamenta la experiencia. Son unidades absolutas y son tres. 1) El alma, que da unidad a la experiencia al proceder como si la mente humana fuese una sustancia numéricamente idéntica que persiste en el tiempo. 2) El mundo como la absoluta unidad de las series de condiciones de la experiencia, es decir como si la naturaleza fuera infinita. 3) Dios (como primera causa), como si hubiera un ser supremo que es causa primera del universo.
Estas tres ideas no son objetos de la experiencia, sino condiciones a priori de todos los objetos, principios que orientan la reflexión filosófica.
La apariencia entra en juego en los juicios, cuando los objetos se ponen en relación con el entendimiento. El entendimiento y la intuición no está sujetos a engaño, solo cuando se combinan puede darse la apariencia. Entonces, las ideas trascendentales no tienen realidad objetiva (aunque el entendimiento de alguna forma necesite pensarlas como objetos análogos). Son apariencias solo cuando las asociamos con objetos de la intuición. La apariencia trascendental solo ocurre cuando estos conceptos puros son objetos de la intuición. La tarea de la crítica es revelar ese engaño. La crítica debe restringir el entendimiento al reino de la experiencia y no sobrepasarlo llegando a lo suprasensible. Es decir, las ideas trascendentales son apariencias trascendentales necesarias, y es cuando tratamos de darles una realidad objetiva en el entendimiento cuando aparece el engaño.
Entonces yo lo que entiendo aquí es que para Kant tenemos esas ideas trascendentales (un yo unitario, una naturaleza infinita, una primera causa) que son demandas de la razón, que necesitamos para poder razonar, pero que son apariencias trascedentales que nos llevan a engaño si las pensamos como objetos, les damos una realidad objetiva y no están simplemente ahí como condiciones del pensamiento.
Esto es lo que yo saco de ahí y creo que da algo de idea de dónde vienen los conceptos y la terminología.