Mi valoración es la siguiente:
- El Fraile está bien, pero es quizás demasiado sistemático, creo que le falt ese hilo conductor característico de la filosofía, que te lleva enlazadamente de un problema a otro.
- El Marzoa es intragable. No es nada original, se basa en la hermenéutica de Heidegger y su teoría del Dasein, luego para entenderlo antes hay que comprender al filósofo alemán, lo cual no es fácil, pues a Don Martin no lo entiende ni el mismo.
- El Oñate reconstruye la filosía griega con su particular exégesis y vocabulario ininteligilbe, o sea, como ensayo pues vale, pero para nada es un manual ni un tratado. Es también fiel a Heidegger, Gadamer y Nietzshe.
- El Copleston, es el mejor, denso pero claro, o sea, completo, aunque ojo que es escolástico y Oñate sigue la línea de la posmodernidad. Yo me he basado en él, pues es a quien mejor entiendo y más me gusta.
- El Reale, es un buen complemento para el Copleston, pues es muy claro y cuenta con unos esquemas estupendos para luego la labor memorizadora, Un hándicap de Copleston y Reale es que dedican poco a los presocráticos, por eso la bibliografía obligatoria incluye el Fraile, que se exteinde más en los pensadores de la fisis. Y es que a Oñate le encantan, pues Heidegger se remite a ellos para explicar su Dasein, tras acusar a Platón del desvío histórico de la metafísisica.
- Sir Bertand Russel, aunque es analítico, resulta genial en su exposición, muy lógico y ameno, pero su historia de la filosofía sólo nos sirve de complemento, para entender todo mejor más allá de la visión neotomista, y sin incurrir en la entelequia de Heidegger y seguidores.