Nolano escribió:
Planteas un escenario apocalíptico como manera de infravalorar las propuestas de cambio de ese movimiento. Ya hay gente que pasa hambre en nuestro país. Las centrales eléctricas están en funcionamiento, mas no llega el suministro eléctrico a miles de hogares por no poder pagar los recibos. El capital financiero ya está en lugares plácidos (léase paraísos fiscales), y si ahora vuelve es sólo para buscar carroña. ¿Abrir la valla de Melilla? ¿Es por ahí por donde entra el grueso de la inmigración ilegal? ¿O entran más bien por los aeropuertos? Y si Melilla (o Ceuta) es un problema, pues salimos de África y asunto solucionado. ¿Colectivizar los campos de España? Empecemos por no subvencionar al que no es agricultor y tal vez luego hablemos de darle la tierra al que verdaderamente la trabaja. ¿Salir de la UE? De esta UE, desde luego que sí; no es la UE romántica, la de los pueblos, que nos prometieron, sino la del gran capital. Etc.

El genio maligno escribió:
Quizás deberíamos pedir perdón todos:

es.wikipedia.org/wiki/Terapia_de_reorientaci%C3%B3n_sexual

(No se pierdan el apartado sobre España)

pulpo escribió:
Tampoco había agentes extranjeros ni su capital que organizasen y financiasen los movimientos de cambio, como sí los hubo y los hay en esos países que citas.

Ya lo decía Maximo Gorki en su "Humanismo proletario": " Exterminad a los homosexuales y el fascismo desaparecerá".
¿Y si empezamos por eliminar subvenciones sobre tierras, trabajos y sectores que no son productivos, y que viven únicamente de la subvención? Seguramente que eso ya no.
Lo que me resulta muy extraño en este discurso "altermundista", que no es sino nostalgia del comunismo rancio con un toque vergonzante y estética alternativa del Corte Inglés, es por qué no se instalan en Cuba o en Corea del Norte para desde allí seguir trabajando eficazmente por la emancipación de los pueblos.
Y sobre la inmigración, cuando al inmigrante no le queda más remedio que delinquir para subsistir, y se ve el porcentaje de extranjeros en las cárceles españolas, se incidirá en que es un dato anecdótico, que no tiene nada que ver con el problema de la inmigración y que nos "encontramos en la media europea". Y alguna acusación de fascista por parte de Pilar Bardem y compañía. Que suelen ser muy gratificantes, revela que la militancia de izquierdas se limita a declarar que no se está fuera del pensamiento único. Eso sí, por lo demás, la pela es la pela: elpais.com/elpais/2013/03/26/gente/1364297452_585627.html

El genio maligno escribió:
Sin ánimo de descontextualizar, sobre todo porque no he leído esa obra de Gorki (como muchos otros que la citan, por cierto), tal vez era una manera elegante de llamar "mariquitas" a los fascistas.

El genio maligno escribió:
No sólo se busca la mejora de indicadores económicos, como la productividad, cuando se subvenciona un sector de actividad. También se tiene en cuenta su relevancia social, etc. Pero puestos a eliminar subvenciones, comencemos con el ejército y con las empresas fabricantes de armamento, que reciben subvenciones en cubierto como compra de armas muchas veces inútiles u obsoletas, sólo para mantener contentos a la caterva de generales y a los accionistas de esas empresas (que han logrado colocar a un agente comercial en el Consejo de Ministros).

El genio maligno escribió:
En Cuba es difícil vivir con un Gobierno que no respeta los DD.HH., y en donde además llevan soportando un embargo estadounidense desde hace 50 años. Y de Corea del Norte no se puede decir que sea un sistema comunista. Algunos usarán esa etiqueta como propaganda autojustificativa, pero no deja de ser un sistema criminal.

El genio maligno escribió:
Hay que tener en cuenta que el sistema penitenciario español es de los más duros de Europa, por lo que estamos por encima de la media europea en cuanto a población reclusa. Y no sé si en esas estadísticas están incluidos los que están encerrados en los Centros de Internamiento de Extranjeros, esos extraños lugares que parece que están ubicados en universos paralelos del derecho español.

El genio maligno escribió:
No entiendo la obsesión de la derecha de este país por la familia Bardem. A mí ni me va ni me viene.

alekhine escribió:
Hablar de gramática griega tiene una grandísima ventaja sobre hablar de lo transfenoménico. Que se destapa el pastel de la ignorancia con mucha mayor facilidad. ¿"Los/las arjais", desde cuándo?

Adjunto tres ficheros sacados del Diccionario Griego clásico-Español de Editorial Vox.

El primero corresponde a la página donde aparece la traducción al español de la palabra "arjé". En el segundo, la página donde aparece el modelo para la declinación de dicha palabra, que es "timé". El tercero corresponde al apéndice gramatical que se incluye al final del Diccionario, cuyo autor es Manuel Fernández-Galiano, Catedrático de Filología Griega en la Universidad de Madrid (en aquel entonces, en que sólo había una Universidad en Madrid).

"Timé" es el modelo de la 1ª declinación, temas en "alfa", femeninos, III tipo. Obsérvese el nominativo plural y dónde lleva el acento. Como las palabras griegas se acentúan siempre ortográficamente, es fácil ver, como en este caso, dónde va el acento.

A partir de ahí, que cada cual saque sus conclusiones y otorgue y retire credibilidades.

Sé que a los moderadores no les gusta que se den las gracias en mensajes repetidos. Espero que sean condescendientes en esta ocasión, pues estos diccionarios son de gran utilidad. Mi conocimiento de griego es nulo, así que te agradezco encarecidamente, Nolano, esta ayuda. El asunto de las credibilidad es, en cambio, más complejo, porque la simplicidad y la ignorancia en latines no quiere decir que se escriban o digan cosas de buena verdad. Y, en sentido contrario, ya leí en el Guzmán de Alfarache que por muy terminista que se sea, el pensamiento puede ser turbio y deshonesto. Repito las gracias. Eso para mi caso. Para el asunto de la profesora es harina de otro costal; solo que el error es mío, no de ella. Salvo el asunto de si es femenino o masculino "Arjé".

En la página 67 de el trabajo de Oñate, lleva por título, LA CUESTIÓN DE LOS ARCHAÍ ONTOLÓGICOS: EL LUGAR DE LOS PRINCIPIOS Y LEYES DEL SER-PENSAR. EL LÓGOS DE LA VERDAD PUESTOS EN CUESTIÓN. ARISTÓTELES Y LOS PRESOCRÁTICOS.

Un capítulo interesante del libro, pues describe la crisis de la teoría de la participación de las cosas en las ideas, frente a la de imitación de aquellas sobre éstas. Según la doctrina de Oñate es que la imitación lleva aparejada una explicación mitológica: la intervención de un Dios antropomórfico: el Demiurgo. De tal forma retomaba Platón, según ella, los esquemas genéticos del las comosmogonías de Homero y Hesíodo.

¿Beethoven? Con esto de la inmanencia de lo eterno, los arjáis y el politeísmo aristotélico a mi me evoca más bien esto:

Jake escribió: Lo de la credibilidad lo decía porque Alekhine se preguntaba a quién había que creer, si a la Asociación Arjaí o a Oñate, a la hora de pronunciar "arjai" o "arjaí"; y credibilidad viene de crédito, de creer o confiar en alguien. Cada uno se encomiende al Santo que quiera. Yo realmente ni siquiera pido confianza en mí, sino en un ilustre helenista. Ya estudiarás algún día, Jake, si es que no han suprimido la asignatura para hacer un hueco a la fenomenología, la interpretación de textos, o algo más molón que la Filosofía de la Lógica, eso de la "norma de la verdad" y tal vez, como me ha sucedido a mí estudiando esta carrera, renuncies a una expresión como "buena verdad". Eso también es un poco cosa de cada cual, pues hay licenciados en Filosofía, incluso catedráticos de Filosofía, que todavía siguen creyendo que hay una verdad de la buena (normalmente la de ellos, no la de los demás, cosa digna de profunda reflexión).

A mí el Beethoven de la tercera época nunca me ha gustado mucho. El de la segunda época, sin embargo, muchísimo. Así que de esa película siempre me ha atraído más la música de La gazza ladra. Que, dicho sea de paso, y para escándalo de los neoschopenhauerianos, que suelen gustar más de Mahler y otros tipos enrevesados, era la música preferida de Schopenhauer, aficionado a interpretar las oberturas de Rossini con su flauta.

Y muy bien traído el vídeo de El Genio Maligno, al hilo de este hilo. Ese entierro de Sigfrido con el sacrificio de Brunilda y la devolución del anillo al Rin es la expresión ontológico-estética del eterno retorno, en el que la escatología deviene protología (me pongo el casco, dispuesto a recibir los habituales golpes de la partida de la porra, pero una vez aprendida la palabreja, protología, le he cogido cariño). Para los no introducidos en el sentido de la Tetralogía wagneriana, conviene aclarar que ese final supone el sueño húmedo de todo oñatista; y no me seáis mal pensados: lo de húmedo es porque acaba en el fondo del río. Me explico.

En el primer episodio, El oro del Rin, el enano Alberico, de quien se han reído las hijas del Rin, a las que el lúbrico nibelungo intentaba seducir, renuncia al amor (¿el eros? ¿la philía?) lo que lo habilita para poder robar el oro del Rin; oro sagrado, símbolo de la prístina paz en equilibrio de las cosas en el estado de naturaleza. El nibelungo se lleva parte del oro y forja un anillo. Roto el equilibrio de la naturaleza, ya en el estado de civilización, el "ilustrado" o "moderno" Wotan no tiene mejor idea que construir una ciudad, el Walhalla, para no vivir a la intemperie. Y no se le ocurre nada mejor que pagar a los Gigantes que lo habían construido, con el oro del Rin. Los Gigantes se pelean, como buenos capitalistas tecnocientíficos, o constructores malvados en la consabida competencia de supervivencia del más fuerte, y uno mata al otro y, convertido en dragón, vive en una cueva, encima de su oro. George Bernard Shaw hablaba de Fafner, el dragón, como metáfora del capitalista que vive revolcándose en sus beneficios (¿anticipo del Tío Gilito?).

En fin, tras muchas vicisitudes (que el que quiera puede escuchar en las cuatro óperas de Wagner, unas doce o quince horas; ánimo amigos) finalmente el oro vuelve al Rin, con el anillo que Brunilda saca del dedo del muerto Sigfrido, recomponiéndose finalmente la armonía universal, vuelta la tierra a su legítimo propietario, el viento (Zapatero dixit). Las hijas del Rin bailan alegres, sus gráciles vestidos talares ondulando en las aguas del río. Una apocatástasis gloriosa en que la inmanencia de lo eterno y la eternidad de lo inmanente, aión y cronos, se unen en la armonía universal recobrada.

Tu turno, Genio Maligno.

Yo creo que la clave del final del Göterdammerung está en las tres últimas leitmotivaciones (perdón por el barbarismo, pero es la jerga wagneriana. Diría que en la escatología se revela la protología. Suena el tema de la redención por el amor, que sólo se había escuchado antes en el III acto de Die Walküre, cuando Brünhilde recoge a Sieglinde tras la muerte de Siegmund, salvándola a ella y a su hija. Suena el tema del Valhalla de una manera especialmente solemne, coincidiendo con el incendio de la morada de los dioses. Y suena el tema de Siegfried de forma también especialmente atronadora.
Es Brünhilde antes de arrojar el anillo y a sí misma a las llamas quien manda a los cuervos que le lleven las noticias de lo que ahí había sucedido a Wotan, que ya estaba preparado con la leña apilada, meditabundo y apesadumbrado. Brünhilde indica que ese es el deseo de Wotan, su propio fin. Precisamente es el deseo de poder de Wotan, y después su miedo a Alberich el que desencadena toda esa rueda de sufrimientos, a los dioses, a Sieglinde y a Siegmund, más tarde a Brünhilde. Y es precisamente Brünhilde la que comprende que la única solución del mal que Wotan ha desencadenado es la disolución, el cese de todo deseo y ambición cifrado en la morada construida por Wotan. Precisamente, el último tema que suena, el de la "redención por el amor" supone que a través de Brünhilde y su amor -compasión- por el mal desencadenado, "ve" que la única respuesta posible es la disolución y el cese de todo deseo.
Esta es mi lectura muy schopenhaueriana sintetizada del final del Anillo. Quizás habría que introducir más lecturas. Quizás algo de Feuerbach en el oro del Rhin cuando El Compositor estaba notablemente influido por su lectura; también el personaje de Siegfried puede representar algunos rasgos nietzscheanos, al romper la lanza donde Wotan guardaba sus pactos, leyes, y en definitiva, el orden del mundo regido por los dioses. Pero creo que es el final el que da sentido a toda la tetralogía, y en todo caso, no son aspectos contradictorios. El mismo Nietzsche en "El caso Wagner" o en "Nietzsche contra Wagner" atacaba furibundamente esta última ópera de la tetralogía furibundamente diciendo algo así como que "lo que debía acabar como un canto de Brünhilde al amor libre, acaba traduciendo el anillo al schopenhauerés, y le hace aprender el mundo como voluntad y representación" (no es literal, pero casi). La idea de disolución del mundo frente a la aceptación del mundo, la redención por el amor-compasión, y el deseo-voluntad como origen del desorden mundano, me hace pensar en Oñate y sus discípulos y disfrutar más todavía de este sublime final.
El tema de la compasión expresado en el grandioso final del Parsifal era lo que más descomponía a Nietzsche. Decía algo así como que "las campanadas de la música de transformación del I acto de Parsifal me martillean la cabeza". La idea de Parsifal como héroe puro (vence la tentación contra la castidad de las doncellas-flor y de Kundry, y haciendo una cruz con la lanza sagrada destruye el jardín de las delicias), le hace decir a Nietzsche que "Wagner se ha vuelto un beato". No hay nada más sabroso que escandalizar a los nietzscheano-oñatistas, y el final de Parsifal es como para que les dé un tan-taran-tán:



Por cierto, cuando Schopenhauer dice que el arte que es expresión y no mera objetivación de la voluntad es la música, indica que ésto se refiere a la música absoluta. Lo que me llama la atención es su preferencia por Rossini, pues más bien es un músico programático.

Y para culminar el soponcio ontológico-estético, el final del III acto de Tanhäuser (a partir de 4.30), donde Heinrich, tras la denegación del perdón papal, se dirige a Venusberg y Wolfram Von Eschenbach le recuerda a su amada Isabel (Santa Isabel de Hungría) y esta ruega por él, y a Tanhäuser se le perdona el pecado de haber morado con Venus (y sus náyades)



Mi límite limitante es el coro de peregrinos de 6.38. Y de propina la llegada de los invitados a Wartburg, en el II acto de Tanhäuser.



No sé a quién dirigirme, pero cuando se haga algún otro vídeo sobre Nietzsche y la ontología estética, me gustaría ser consultado, para evitar que esos compases bizarros que ponen de óperas wagnerianas no suene tan estólido para quien conozca las piezas en cuestión...
Deberían en tales vídeos poner fragmentos del Carmen de Bizet que según dice Nietzsche en alguno de los opúsculos mencionados era lo que más le había acabado gustando. Obviamente, eso lo decía para molestar al Compositor, porque la gran ópera francesa es soberanísimamente aburrida.