Oh no, no lo tomemos desde la ironía, de él dijo Platón que fue el "padre" de la filosofía, aunque luego se zumbara al padre.
Del poema de Parménides "Sobre la naturaleza" tenemos un Proemio e importantes fragmentos de la primera parte pero, de la segunda, en la que trata de su visión del mundo físico, nos han llegado retales insuficientes para reconstruir su pensamiento.
Pero ya baraja conceptos tales como "ser", objeto de un montón de interpretaciones o el "uno", que dan para masticarlos mucho rato.
Se vale del mito pero con una nueva propuesta, la de mostrar un camino, un método cuyo objetivo es el conocimiento de la realidad. Una propuesta es su física, la de la mezcla y la separación, su verdadera revolución en la historia del pensamiento. Dos entidades se barajaban, cielo y tierra y para Parménides: luz y oscuridad y una ruptura con la disimetría para aportarnos la lógica de la contrariedad: una unidad que conserva intactos los términos opuestos, ambos contrarios, idénticos a sí mismos y diferentes entre sí, unidos sin menoscabar su identidad. Una física de la unidad que es plenitud. Cómo entender ese dualismo que unifica contrarios sin fundirlos?
Imaginad una noche estrellada, la oscuridad y un sinfín de puntos luminosos, una visión unitaria en la que la oscuridad no resta identidad a cada una de las estrellas, tampoco a la inversa, la importancia del equilibrio, la unidad de los contrarios.
Hay dos caminos y el del no-ser es imposible, solo el del ser hace posible el pensar.