Bueno, visto lo visto, parece que el tema del hilo el mérito y lo poco que tiene que ver con el nivel económico, queda relegado por asuntos de quinto orden como la validez de las encuestas o un asunto de clasificación de “buenos” y “malos”. Pues nada, por alusión, entreguémonos a la diversión (y me ha salido un pareado sin haberlo intentado)
Kraton escribió:
Grupo uno: agricultor, maestro, medico, científico, operario de fábrica…
Grupo dos: político, empresario, ejecutivo, bróker...
Y:
Kraton escribió:
Informe de Metroscopia Julio de 2013
“Porcentaje de españoles que evalúan de forma positiva la contribución, que con su funcionamiento, hacen al bienestar publico…”
Médicos sanidad publica 92%
Pequeña y mediana empresa 90%
Nolano escribió:
Así que hay algunos que Kraton mete en el grupo de los "malos" que la sociedad parece que ve como "buenos" o no tan malos. Curioso.
Creo que cuervo ingenuo acierta al decir:
cuervo ingenuo escribió:
Sería interesante saber si en la encuesta se especificaba qué es una PYME... seguramente muchos encuestados se sorprenderían al saber que se considera una pequeña o mediana empresa a una empresa con hasta 50 empleados y 10 millones de euros de facturación. Atendiendo únicamente al léxico uno podría fácilmente pensar en los autónomos o en las microempresas cuyo prototipo de empresario está muy cerca de la mayoría de los trabajadores.
Nolano escribió:
Así que hay algunos que Kraton mete en el grupo de los "malos" que la sociedad parece que ve como "buenos" o no tan malos. Curioso
Respecto al tema de “buenos” y “malos”, como ya respondí a Bud y vuelvo a responder:
Kraton escribió:
Ahora bien, también opino que en la sociedad actual no existe la más mínima correlación entre mérito personal y nivel económico, más bien todo lo contrario. Vamos a analizar, para ello constituimos dos grupos en función a su nivel económico:
Grupo uno: agricultor, maestro, medico, científico, operario de fábrica…
Grupo dos: político, empresario, ejecutivo, bróker...
Como veras el tema principal que expongo es negar que exista correlación alguna entre mérito personal y nivel económico, y para ello constituyo los dos grupos en función a su nivel económico, no por su nivel moral. El grupo dos, por mucho que tenga méritos menores al grupo uno, acaba resultando que siempre obtiene un nivel económico desproporcionadamente mayor. El nivel económico está en relación al grupo social, no al mérito personal. Esa es la línea principal del tema, aunque en su desarrollo se puedan desprender tintes morales, inevitables al exponer las funciones y consecuencias de los comportamientos de las personas según su grupo social.
Nolano escribió:
Es verdad, Cuervo Ingenuo, pero toda la encuesta podría ser fácilmente impugnada.
Las encuestas no se impugnan, se interpretan. Y se les interpreta con referencia al marco de origen y finalidad entre otras variables, en este caso recabar la opinión de los ciudadanos sin entrar a valorar el porqué de dicha opinión, cuestión en la que Nolano se entrega con tanta fruición como falta de datos de apoyo, sustituyendo documentación por elucubraciones de marcado tinte ideológico, por el estilo de:
En esas condiciones, éste piensa que un servicio gratuito (eso cree él) contribuye más al bienestar de lo que lo hace un servicio por el que tiene que pagar.
Porque la gente piensa que si puede ver cine gratis eso contribuye más al bienestar público que alguien que ofrece cine pagando.
Pero el ciudadano no es consciente de que alguien paga la videoteca pública
Es imposible que se valore mejor a aquéllos que a éstos si no es porque la gente tiene muy en cuenta, para valorar el servicio, cuánto paga por él, y no sólo el servicio y su calidad en sí mismos considerados.
¿Y cómo sabe Nolano que es eso lo que piensan, son conscientes o tienen en cuenta TODOS los ciudadanos o TODA la gente? Es un poquito arriesgado hablar tan a la ligera sobre lo que guía el comportamiento humano, dándole un carácter tan monolítico y sesgado, cuando la psicología, la sociología, la biología y hasta la misma filosofía, como disciplinas completas, no lo tienen tan claro.
Y luego afirma:
Nolano escribió:
El que puede permitirse pagar un seguro privado, a pesar de pagar también obligatoriamente a la Seguridad Social, paga un seguro privado. Y los funcionarios de MUFACE (salvo algún caso muy aislado, que también lo hay) prefieren adscribirse a una Compañía privada que a la Seguridad Social.
De todo lo cual, según los argumentos de Nolano, se deduce:
Primero.- TODA La gente, TODOS los ciudadanos en su generalidad, solo valoran lo gratuito por encima de la calidad y el servicio y que TODOS “piensan” que solo de la gratuidad depende su bienestar.
Segundo.- Los que tienen dinero para pagar seguros privados y los funcionarios de MUFACE, tienen en cuenta los servicios y la calidad.
Por lo que se puede concluir:
1.- Los que tienen dinero y los funcionarios de MUFACE no son ciudadanos, ni son gente, pues ya se sabe que TODA la gente y TODOS los ciudadanos solo buscan lo gratuito. Deben ser una clase “especial” o “superior”.
2.- Quien paga tiene derechos y es más listo, ergo, como el rico puede pagar más, es más listo y tiene más derechos.
(ya estamos otra vez con el dichoso luteranismo-calvinista “por la gracia de dios”)
Según se desprende de la argumentación de Nolano, por una parte están los ciudadanos y la gente, que solo escogen y miden su bienestar en función a su gratuidad sin ningún tipo de criterio de calidad y servicio, pues son unos miserias y unos ignorantes. Y por otra parte están “ El que puede permitirse pagar un seguro privado” (¿gente de bien?) y los funcionarios de MUFACE (que habrán hecho los pobres funcionarios para que los haya metido en estas) que van de “sobraos” no midiendo los costes y guiándose solo por un clarividente CRITERIO de calidad y servicios, gracias a sus superiores conocimientos e inteligencia.
Vamos a ver, a lo mejor que una parte de la ciudadanía, tenga que priorizar la economía por encima de cualquier otra criterio, no es producto de su moral miserable, si no producto de un sistema laboral que hace que la mayor parte de los trabajadores tengan una absoluta precariedad laboral, así como unos sueldos miserables, como recientemente ya se ocupo de alardear ante los japoneses nuestro amado presidente. A todos nos gusta lo bueno, el que escoge el jamón más barato en blíster, no lo hace por ser un miserable y un tacaño, también le gusta el jamón de pata negra, pero su puesto de trabajo a tiempo parcial no se lo permite. La búsqueda de lo gratuito no es una opción tacaña y cicatera de vida, ni falta de criterio, sabiduría o “talento natural”, es producto de un mercado laboral en precario y con sueldos miserables, que hace que el criterio económico cuente más que el de calidad o servicio. La necesidad, no la cicatería o la ignorancia.