De momento ,la humanidad es puro emprendimiento.
Pero para acotar el tema y,si acaso , para relacionarlo con la filosofía occidental, en las Colonias Griegas en su relación con gentes de otras tierras, podría darse un origen de emprendimiento más económico evidente, donde podría estar incluso,según algunos autores el origen de la filosofía moderna. AL fin y al cabo, emprender(aún en sentido economicista y materialista) es pensar, subsanar todo tipo de problemas y contentar a las partes.
En España, y más, desde la crisis del 2007, se está queriendo ver un cierto auge de este tipo de empresa, que podríamos calificarlo ya como fenómeno social.
La mentalidad y los fines de las instituciones(bancos, prestamistas, gobiernos, etc.)que promueven este tipo de movimiento,son dispares pero confluyen en un tipo de intereses muy rebuscados y bastante lejos de un sentido , podríamos decir, "benévolo" del asunto.
Los bancos, como principales promotores económico-sociales,nunca te ayudarán a emprender si el dinero prestado no es a cambio de un bien poseido, el cual iguale o supere al dinero prestado. Nunca a fondo perdido, aunque el proyecto sea rentable o viable.
Los gobiernos y sus planes de emprendimiento,saben de la inutilidad de los mismos, pero con tal de enmascarar las cifras del paro y de engrosar, aunque sea temporalmente, las arcas públicas,se gastan inútilmente ciertos fondos que podrían ir destinados a la formación o industralización.Éste es el panorama español del emprendimiento.
En USA es muy diferente, ,donde se le da prioridad para ayudas económicas al emprendedor que ha tenido ya algún fracaso anteriormente, porque ven en él una fuente de experiencia.Esta diferencia abismal de entender el emprendimiento condiciona a toda la economía de un país.
Y ante este variado panorama, está el emprendedor autodidacta. El que coge los bártulos de su ciudad polvorienta y ruidosa y se va con toda su familia al pueblecito del abuelo a cultivar gallinas y cerdos. Que emplea el tiempo en reformar la casa del abuelo,en cultivar un huerto y pretendiendo hacer una vida casi aséptica basada en la autosuficiencia y lejos de los condicionantes tecnológico-sociales impuestos hoy día. Es un fenómeno cada vez más extendido pero que en mi opinión, minoritario y que no tiene mucho futuro porque al final , este hombre, se da cuenta de la dependencia tecnológica que sufre para no caer en el habitacionismo primitivo del hombre pre-Neolítico.