Silvanus escribió:
Se va por las ramas y no contesta. No importa, porque tengo más preguntas. A ver si alguna le sirve para contestar de una vez.
Usted dice: "irreal es la misma irrealidad que tu otorgas a los sueños cuando despiertas."
"Percibo a las personas, no como otros percibidores, sino que como efectos de mi propia percepción."
"No puedo estar seguro que "los otros" son perceptores o si siéndolos, lo hacen como yo, solo pongo una fe emocional en ello."
Es decir, que todo es como en sueños. Todo es "teatro mental" y un teatro mental individual, que no se puede afirmar ni negar si es el mismo que otros teatros mentales. Es más, ni siquiera si hay otros individuos.
Entonces, ¿la esquizofrenia es un teatro mental más, tan legítimo e irreal como el mío?
En otro orden de cosas, dado que no sé si los "otros" son perceptores, es decir, iguales a mí mismo, ¿qué ocurre si asesino o violo a ese otro/otra? En verdad, según usted, sólo estaría matando una percepción mía, una imagen cerebral mía. Más allá de esa imagen, dado que todo es mental, no hay materia.
En fin, dejése de semejantes frivolidades. Y ante todo, le recomiendo dos cosas:
1) Póngase a estudiar. Para empezar comete muchas faltas de acentuación y de expresión.
2) Vuelva a bautizarse con un nuevo nombre artístico. Le sugiero dejar de ser Neurometafísico (porque en verdad lo que dice ni es científico ni filosófico). Proclámese, y así no generará dudas, como Pseudopatafísico. Tiene más carisma.
Con Dios.
No veo la razón de reaccionar tan violentamente, esto es un espacio de discusión y todas las ideas son bienvenidas. Sobre todo cuando se trata de ideas que constituyen una tesis aprobada con excelente calificaciónde post grado en filosofía de la mente.
Sin embargo, abstrayéndome de su reacción, tiene un punto interesante y que es la critica que siempre se hace al solipsismo ¿Por qué si los demás son sólo imágenes mentales no hago lo que quiera con ellas?
Porque este escenario mental no es determinado por mí. No soy el dueño de las impresiones que van surgiendo en él ni puedo alterar el curso que tales hechos toman. De la misma forma cómo ocurre en un sueño vívido (no confundir con lúcido). Usted no se percata de que es un sueño hasta que despierta e incluso puede suceder que en un sueño de esa naturaleza usted elucubre si acaso ese plano de percepción es sólo un sueño, pero ello no le habilitará para cambiar las reglas de ese mundo onírico.
De hecho, la voluntad es una ilusión porque la consciencia significa un acto de percatación de cosas o hechos que ya estaba allí, incluida sus reacciones o supuestas decisiones. El solipsismo siempre ha sido negado porque los que sostenían una tesis semejante nunca se hicieron cargo del tema de la voluntad, pese a que era deducible.
Afectuosos saludos