elías escribió:
La pregunta sería: ¿Y por qué se pone de moda todo lo oriental, las medicinas alternativas, las pseudociencias, el tarot, etc….? ¿ Cómo es posible que en pleno siglo XXI hayan vuelto, si es que alguna vez se fueron, esas visiones del mundo?
¿No será que occidente, y tras la secularización, y por tanto, con el final de una determinada visión “encantada” de la realidad, está necesitada de un "re-encantamiento"? ¿No será, y más allá de cualquier tipo de explicación, que el ser humano necesita de una visión mítica, religiosa o de una visión “encantada” del mundo para poder seguir viviendo? ¿No será esa una forma velada de crítica, pero no a la ciencia ni a la tecnología, sino a esa forma de poder que es el cientificismo y la tecnocracia?
Un saludo
La ciencia y la técnica no son más verdad que las danzas chamánicas pero son más efectivas y precisas lo que las hace más productivas. Esto hace que sean las aliadas de un sistema basado en la producción y competencia.
Lo que ocurre es que un mundo sin magia ni imaginación no merece ser vivido. Quienes creen en el cientificismo y la tecnocracia se inventan sus propias formas de magia como es la ciencia ficción: marcianitos, máquinas del tiempo, conspiraciones galácticas, etc.
Para los que la ciencia y la técnica no van mucho con ellos, son más de letras, por decirlo de forma tosca, optan por el tarot, las piedras mágicas, las lechugas curativas y cosas así.
Creo que sí, que el ser humano necesita un misticismo, una visión mítica del mundo. El motivo puede ser porque pensamos a través de relatos ya que nuestras vidas se estructuran como narrativas (aquí sigo un poco a Ortega y Gasset). Si es constitutivo del ser humano, debemos asumir que viviremos con esos mitos y relatos.
Creo que un Estado que se diga ilustrado no puede permitir que esto domine la vida pública. En España puedes ir a un curandero pero este no puede cobrarte por sus 'servicios'. Pero puede aceptar donativos; hecha la ley hecha la trampa. En este aspecto, en su papel social y económico, es donde creo que hay que reflexionar. En China se permite que funcione de forma paralela pero en Occidente no. Si queremos darle un punto de vista positivo, se sabe lo que se está haciendo a los pacientes mientras que de otro modo queda oculto.
Saludos