No lo creo. En mayor o menor medida todos utilizamos terapias naturales, normal, pues venimos de la naturaleza y nuestras soluciones primeras son las naturales. Lo malo de las auto denominadas terapias naturales es que algunas se creen con soluciones muy por encima de los estudios y evidencias que la medicina ha planteado, y ahí chocamos con un hueso duro de roer.
El problema reside en lo que se está denominando "natural". El uso de la dieta o las plantas con propiedades medicinales datan de miles de años: en la cultura egipcia (datos importantes reflejan el uso y conocimiento de las plantas medicinales en esta época encontrándose referencias en el papiro de Ebbers, 1500 a.c), china (canon de medicina interna del emperador amarillo, unos 2000 a.c), griega (Dioscórides, Hipócrates...), etc. Datos científicos actuales revelan que la dieta es un factor importante en la génesis de enfermedades y un gran porcentaje de los principios activos de los medicamentos proceden del reino vegetal.
Ahora, si por natural empezamos a entender el reiki, la curación angélica, la homeopatía antroposófica y demás majaderías, me temo que nos salimos del concepto. A mi modo de ver la medicina natural tendría que ver con emplear los medios que la naturaleza en origen nos ofrece y que eran ya utilizados por nuestros antepasados empíricamente, en ocasiones con buenos resultados: uso de plantas con propiedades medicinales, balneoterapia (baños de aguas termales, minerales, barros en dermatología, etc), el masaje y las técnicas de rehabilitación, la dieta como medio de mejorar nuestra salud, la luz solar, etc. Lógicamente si un paciente mejora de su ardor de estómago con infusiones de manzanilla y regaliz (por poner un ejemplo) creo que es preferible a prescribir un fármaco. Pero de ahí a decir que con terapias naturales se cura el cáncer, pues va a ser que no. Afortunadamente la ciencia ha avanzado sobresalientemente y cuando un fármaco es necesario debe administrarse y dejarse de zarandajas.