Hola rdomenech31
Voy a explicarme mejor porque al leerme veo que puedo llevar a la confusión. He dicho que la realidad humana es una unidad psico-orgánica. Es decir, en el plano talitativo se dan tanto notas psíquicas (inteligencia, sentimiento y voluntad) como notas orgánicas. Y es ese plano talitativo (psico-orgánico) el que determina funcionalmente una determinada forma de ser o de realidad (plano trascendental). O dicho de otra forma, las notas psíquicas (inteligencia sentimiento y voluntad) no pertenecen al plano trascendental sino al talitativo. Y son las notas psíquicas y orgánicas, en unidad, las que determinan una determinada forma de ser (plano trascendental).
Resumiendo, existe dos planos, a saber, el talitativo y el trascendental. Y dentro del talitativo podemos hablar de notas, dimensiones, propiedades o funciones orgánica y psíquicas que se darán en unidad.
¿Y cuál es esa forma de ser del ser humano? Pues esa forma de ser es el de una realidad personal, y por tanto, capaz de autodeterminarse. El concepto de persona es un concepto trascendental y no talitativo aunque tal plano trascendental no pueda darse sin el plano talitativo, es decir, de las notas o dimensiones psico-orgánicas.
Decía ya san Agustín que el hombre posee inteligencia, sentimiento y voluntad pero que el hombre no es inteligencia, sentimiento y voluntad sino que la inteligencia, el sentimiento y la voluntad son suyas, es decir, de la persona.
Por tanto, y disculpa si te he llevado a la confusión. la pregunta podría ser ¿Lo que se mueve en la dimensión psíquica (inteligencia, sentimiento y voluntad) no se mueve en absoluto en el plano del determinismo o se mueve en el parcialmente?
Ya había dicho que no existen ni “la” consciencia ni “el” inconsciente sino actos conscientes o actos inconscientes. Pero además, es que el que un acto sea consciente no significa o implica que sea voluntario. Fíjate que en tu ejemplo dices: “si yo estoy pensando en algún asunto que me preocupa, puede que eso me produzca determinadas emociones (como el miedo, por ejemplo)”. Pero es que en ese ejemplo, y precisamente, sólo hablas de la inteligencia y del sentimiento pero dejas intacto el problema de la voluntad. Ahora bien, cuando se da ese sentimiento de miedo yo puedo o seguir instalado en dichos sentimientos o puedo decidir, y porque tengo miedo, irme con unos amigos y olvidarme de la cuestión.
La dimensión psíquica está conformada por la inteligencia, el sentimiento y la voluntad. Y en lo tocante a la voluntad; o un acto no está determinado o no cabría hablar de un acto voluntario. Lo que sí podría ocurrir es que en un acto que nosotros consideremos que sea voluntario en realidad no lo sea. Pero si no lo es será debido precisamente a que está determinado. Salvo que lo que quieras decir es que en una acción que juzguemos como voluntaria no todos los factores lo sean, es decir, que seamos menos libres de lo que nos creemos.
También me gustaría decir que esa voluntad no es ilimitada. Considero que no existe una voluntad pura, sino que la voluntad es una voluntad tendente o condicionada ¿Condicionada en qué sentido? Pues en el sentido de que la voluntad no se da en el vacío, sino que cuenta con unas tendencias, instintos, etc. que no son infinitos o ilimitados. Es que si lo fueran me da que la voluntad (en realidad, la persona) quedaría totalmente paralizada.
Y me gustaría añadir, y para finalizar, lo siguiente. He dicho que eso que llamamos la psique, alma o mente sería la inteligencia, el sentimiento y la voluntad. Pero, y según yo lo entiendo, esas notas no se dan por separado. Es decir, no es que “la” inteligencia piense una determinada cosa cuyo contenido pasa posteriormente “al” sentimiento que sería el encargado de sentir algo que ulteriormente pasaría a la “voluntad” que sería la encargada de desearlo o apetecerlo (o no). Entre otras razones porque quien piensa, siente o desea no es la inteligencia, el sentimiento y la voluntad sino la persona de carne y hueso. Se aprehende, se siente y se desea a la vez.
Según estudios neurocientíficos cuando yo coloco un determinado objeto, como pueda ser la fotografía de la madre del sujeto del experimento, no es que se “encienda” primero el área del conocimiento, posteriormente el área del sentimiento, y ulteriormente el de los deseos, sino que se “ilumina” todo a la vez. Lo cual querría decir entre cosas, pero no quisiera entrar ahora en ello, que todo objeto posee unas propiedades que son susceptibles de ser inteligidas, sentidas y deseadas. Ya saben, el tradicional verum, bonum y pulchrum.
Aunque como he dicho todo lo orgánico es psíquico y todo lo psíquico es orgánico no cabe, por tanto, separar lo orgánico de lo psíquico en la realidad, aunque sí lo podamos hacer desde el ámbito del análisis.
Desde el ámbito del análisis podemos decir que lo que vemos, sentimos o deseamos “es” la actividad cerebral si nos centramos en la dimensión orgánica como podemos decir que desde la dimensión psíquica serían las diferentes vivencias. O dicho de otra forma, lo que acontece en el ser humano se plasma orgánicamente como actividad cerebral y se plasma psíquicamente como vivencia. Y ninguna de ellas sería causa de la otra (no defiendo el dualismo) sino que estarían correlacionadas, es decir, lo que en el ámbito orgánico es la actividad cerebral en el psíquico son las vivencias.
Bueno, no sé si lo he aclarado o lo he embrollado más.
Un saludo.