elías escribió:
Hola, Lapidario
Dices, Lapidario: “Una pregunta, que es la segunda vez que te leo lo de los errores categoriales y me parece interesante... ¿Qué distingue un error categorial de una expresión metafórica o un juego del lenguaje a la Wittgenstein?
Ya el “segundo” Wittgenstein nos habló de la “validez” de los diferentes usos del lenguaje. Desde mi punto de vista la diferencia estriba precisamente en saber cuáles son los diferentes usos del lenguaje según desde el ámbito del que se hable. Un error categorial se comete cuando trato de predicar una categoría que es válida en su ámbito (científico, filosófico, poético, etc) a otro ámbito del cual no puede ser predicable en la creencia de que también posee un grado de validez.
Si un científico nos dice que la Tierra y el Sol se atraen cuales amantes enamorados pues está cometiendo un error categorial. Y si nos dice que es una metáfora pues entonces ya no nos está hablando como científico. Podrá hablarnos desde el ámbito poético, por ejemplo, y allí sí que podrá tener su grado de “validez”.
Hola, Elias!
Esto es precisamente lo que me parece interesante (desde mi perspectiva de recién llegado a la filosofía, sin opiniones grabadas en piedra, etc etc)... Porque no veo tan claro que los ámbitos estén (o
deban estar) tan marcadamente separados. Un lenguaje formal carente de ambigüedades podría indicar al principio de cada declaración en calidad de qué se enuncia: como científico, poeta, o vendedor de crecepelos. Pero en lenguaje cotidiano los ámbitos están entremezclados más de lo que parece, o al menos más de lo que le gustaría a algunos. Si el científico de tu ejemplo dice que el amor atrae la Tierra y la Luna, habrá que contrastar esa afirmación con el resto de su intervención y el contexto para tratar de entender si es una metáfora, un error categorial, una expresión florida... Si esa frase está en un artículo del "Scientific American", rodeada de ecuaciones y no parece ser el núcleo del razonamiento, será una metáfora. Si la frase está en un libro sagrado de una secta, vale la pena poner en sospecha si está hablando literalmente.
Anteayer leí un artículo muy chulo sobre la mezcla de ciencia, arte y metáfora, a razón de un libro recién publicado sobre la visión científico-poética de Goethe:
elpais.com/ciencia/2020-09-24/la-vision-...a-de-la-ciencia.html
Una frase puede ser poco válida en el ámbito científico, muy válida en el poético y de validez discutible en un ámbito mixto. Y a donde quería ir a parar es que veo tan posible cometer un error categorial al emitir una frase dudosa como al interpretarla. Pequeña digresión: en el follón del "affaire Sokal" el error categorial quizá lo cometió el propio Sokal, por ejemplo cuando acusaba a Lacan de usar de forma incorrecta el concepto "raíz cuadrada de menos uno" al asociarla al falo, cuando en realidad ese concepto se estaba usando de forma más metafórica que matemática.
En cualquier caso, ¿y si no hay contexto para la frase "dudosa"? Pues ahí quizá vale la pena aplicar el famoso principio de caridad y asumir la interpretación más racional y sólida de las muchas posibles. Y por supuesto, atribuir esa interpretación puede ser un error, por lo que enseguida comentas tú y en lo que te doy la razón:
elías escribió:
Sí, sé que se me podrá decir que quienes dicen que es una venganza del reino animal o de la madre tierra lo dicen metafóricamente. Pero eso es precisamente lo que cuestiono. ¿Sabes cuanta gente cree, pero no ya en sentido metafórico, que si soy géminis o capricornio soy de tal o cual manera porque Júpiter está en conjunción con Saturno? ¿Crees que lo dicen en sentido metafórico?
Hay de todo, como en botica. Hay quien cree, hay quien quiere creer (el "I want to believe" del agente Mulder) y hay quien no cree pero usa el horóscopo como forma de psicología Fisher-Price que le permite ligar o romper el hielo en las conversaciones. Fíjate que cuando se intentan usar argumentos racionales a un creyente en la astrología para romper esa creencia (yo lo he hecho bastantes veces), no suele funcionar... Supongo que es porque el creyente no está centrado en el ámbito racional-científico, sino en el sentimental-mágico. No sé. Entiendo el peligro, sobre todo cuando alguien mezcla el ámbito poético con el médico... Pero ese sería tema para otro hilo.