Escribiendo el trabajo sobre Nietzsche llegué a la anécdota famosísima del bigotón, ya a las puertas de la locura, abrazándose a un caballo maltratado por un cochero en Turín y pidiéndole perdón entre llantos por la crueldad humana. El caso es que esa anécdota es casi seguro apócrifa, y uno de los argumentos en su contra es que es sospechosamente calcada a una escena al principio de
Crimen y Castigo en la que Raskolnikov, antes de convertirse en asesino, sueña una escena dantesca en la que él mismo, de niño, llora ante un caballo maltratado por una multitud. Pero claro, otra explicación es posible: quizá Nietzsche, que fue un lector insaciable de Dostoievski y en particular de
Crimen y Castigo, cortocircuitó en ese momento y reprodujo en vivo esa escena que se habría grabado en su mente.
Todo esto para decir que, ya que estaba, me puse a leerme Crimen y Castigo, que no lo había hecho nunca y me pareció un buen momento. Y, joder, lo he devorado. Daría para club del libro/comentario por aquí.
Comentarios así a vuelapluma que me han impresionado:
- No me extraña que a Nietzsche le gustara: hay aquí anuncios claros de la muerte de Dios, de la ética singular del superhombre y de la moral de amos y esclavos, o al menos de una de sus lecturas más hardcore.
- No me esperaba que fuera tan entretenida, fácil de leer y hasta divertida... Veo que se publicó por entregas, lo que me cuadra bastante con el estilo de escritura.
- Solo conocía de oídas a Raskolnikov, que es el Hamlet atormentado y (no nos engañemos) algo capullo de la historia, pero casi que lo mejor del libro son sus personajes secundarios... El juez de instrucción imprevisible y con aire de Colombo, el colega Razumijin con corazón de oro, la hermana con alma de mártir, la desestructuradísima familia Marmeládov con su hija forzada a la prostitución, el libertino y turbio Svidrigáilov con sus secretos y miedos ocultos...
- Me ha encantado la desconexión entre los actos de Raskolnikov y sus palabras, cómo repite hasta la extenuación que no se siente culpable de su crimen y mantiene hasta el final sus racionalizaciones, pero su culpa rezuma de su comportamiento y se refleja en todas sus palabras y acciones...
En fin, una grata sorpresa muy recomendable. De Dostoievski solo había leído
Memorias del subsuelo, El jugador y Noches Blancas... Le daré un tiento a
Los hermanos Karamázov cuendo pueda.