¡Vaya! Cuánto me alegro de que disfrutéis leyendo a Dostoyevski, aunque no me extraña de estudiantes de Filosofía.
Advertir, antes que nada, que llevo un buen rato escribiendo este mensaje (y además todo el día de hoy, y el anterior, y muchos días anteriores... los he dedicado a leer a Heidegger) y no sé cómo estructurarlo, así que se queda un tanto confuso, con suerte solo la mitad de lo que lo estoy yo ahora mismo:
Yo empecé con los Demonios y creo que ha sido la novela que más me ha afectado en toda mi vida; en su momento fue un espejo a un pasado en el que no solo vi mi reflejo (en ciertos personajes con ideas y actitudes que en realidad son "eternas"), sino también a mi padre, a mi madre, y a otros miembros de mi familia...
Y es que lo que dice Anuska sobre el mundo interior de Raskolnikov sucede en todas las novelas de Dostoyevski; la profundidad psicológica que alcanzan algunos de sus personajes resulta terrorífica, por lo que el impacto al ver esos retratos/reflejos nunca se me irá de la cabeza. Lo mismo que otras tantas escenas de sus novelas como la ya mencionada del caballo y el látigo, la aparición de cierto demonio de poca monta antes de un juicio, el juicio, los paseos de Noches Blancas por San Petersburgo, la ventana que se abre a un día turbio y triste, el campesino, el niño y el lobo... Todo se mezcla con la experiencia propia de una forma u otra. Me hicieron llorar entonces y me están haciendo llorar ahora.
En varias ocasiones, he visto acusaciones de cierto "caricaturismo" en los personajes de Dostoyevski. En mi opinión son injustas, pues aunque no les suele faltar excentricidad tampoco se salen del realismo, además también es posible que:
MAX: Los héroes clásicos reflejados en los espejos cóncavos dan el Esperpento. El sentido trágico de la vida española sólo puede darse con una estética sistemáticamente deformada.
DON LATINO: ¡Miau! ¡Te estás contagiando!
MAX: España es una deformación grotesca de la civilización europea.
En este caso, aunque es totalmente distinto el enfoque de Dostoyevski, tal vez fueran intercambiables los términos de España y Rusia (que en su momento bien pudieron haberlo sido pero proponerlo ahora mismo sería caer en la exageración).
En fin, aunque nunca compartí la solución propuesta por Dostoyevski, sí tomé mucha mayor conciencia de mí mismo y de la psicología humana gracias a él. Una deuda impagable.
Solo puedo decir que os animo a seguir la misma senda que ya parecéis haber empezado, deciros que si leéis en formato electrónico y no encontráis algún cuento, obra menor o diario, me lo podéis pedir por mensaje privado, tengo toda su obra. Yo os seguiré leyendo a vosotros.
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¿Alguien ha leído "El hombre sin atributos"? Yo admito que la empecé a leer tan solo porque me llamó la atención el nombre (y después la sinopsis):
El hombre sin atributos
Sinopsis: "El hombre sin atributos fue escrita entre 1930 y 1942 y quedó interrumpida por la muerte del autor. Los actores principales de esta tragicomedia monumental son: Ulrich, el hombre sin atributos, el matemático idealista, el sarcástico espectador; Leona y Bonadea, las dos amadas del matemático, desbancadas por Diotima, cerebro dirigente de la «Acción Paralela» y mujer cuya estupidez sólo es comparable a su hermosura; y Arnheim, el hombre con atributos, un millonario prusiano cuya conversación fluctúa entre las modernas técnicas de la inseminación artificial y las tallas medievales búlgaras."
En mi opinión sigo sin estar preparado para algo tan sutil; no pasa nada y al mismo tiempo todos los motivos de peso se mueven en las sombras, toda la aproximación es oblicua y extraña. Gran parte del tiempo me ha aburrido extraordinariamente y al mismo tiempo me ha gustado, la he dejado y he vuelto mil veces, ¡y me he acabado leyendo los dos tomos!
Por recomendar una lectura reciente que tampoco se me irá de la cabeza:
Un planeta llamado Shayol
Sinopsis: "El protagonista, Mercer, que vive dentro del Imperio, ha cometido "un crimen que no tiene nombre". Es condenado por el Imperio al planeta Shayol, donde vive en una colonia penal cuyos habitantes deben sufrir grotescas mutaciones físicas causadas por diminutos simbiontes llamados dromozoos. A la mayoría les crecen órganos extra, que el Imperio extrae con fines médicos. El toro-hombre B'dikkat administra a los presos una droga llamada supercondamina que alivia el dolor de su castigo y varias cirugías."
En realidad es un cuento que se puede encontrar dentro de "Los Señores de la Instrumentalidad, vol. II" de Cordwainer Smith,o también
aquí en inglés. Cordwainer Smith es el pseudónimo de Paul M. A. Linebarger, un tipo de lo más curioso. En general no me gusta su estilo de escritura, pero es muy creativo, todas sus historias se caracterizan por esa originalidad y por una crueldad apabullante (aunque casi ninguno tanto como este) pero detrás de esa crueldad se ve una empatía y un amor profundo que abarca a humanos y no humanos.
Este cuento de "Un planeta llamado Shayol" también me recordó a una lectura de Sabidurías Orientales Antiguas de la India, el Budismo y China:
"Zisi, Ziyu, Zili y Zilai dijeron hablando entre ellos:
—«Si alguien puede tener la nada por cabeza, la vida por espinazo, y la
muerte por rabadilla, y si conoce que la vida y la muerte, y el tener y el
perder, son una y la misma cosa, a ése tendré por amigo».
Miráronse los cuatro y dieron en reír. Concertáronse y se hicieron
amigos.
A poco Ziyu adoleció, y Zisi fue a visitarle. Dijo Ziyu: —«¡Grandioso!
El Hacedor me ha vuelto un ser deforme». Encorvado y cheposo, las
cinco visceras en la parte superior del cuerpo y el mentón escondido bajo el
ombligo, los hombros por encima de la coronilla y el moño apuntando al
cielo: habíase quebrado en él la armonía entre el Yin y el Yang. Su mente,
empero, manteníase serena y como si nada acaeciera. Arrastróse hasta un
pozo que junto había, y en él se miró.
—«¡Ay! —exclamó—. ¡En qué ser deforme me ha convertido el
Hacedor!».
—«¿Estás enojado?» —le preguntó Zisi.
—«No —dijo Ziyu—. ¿Por qué habría de estar enojado? Pluguiera al
Hacedor volver en gallo mi brazo izquierdo, y cantara yo al alba;
pluguiérale volver en ballesta mi brazo derecho, y diera yo en cazar una
tórtola para comerla asada; pluguiérale mudar en ruedas mi rabadilla y mi
espíritu en caballo, y montara yo en ese carro, que no habría menester de
otro. Además, el ganar depende de la oportunidad del momento, y el perder
pide acomodarse. Quien es capaz de atenerse a la oportunidad y de
acomodarse a las circunstancias, nunca se verá invadido de tristeza ni
contento. A esto llamaban los antiguos “desatar el nudo”. El hombre que no
es capaz de desatarse por sí mismo, se encuentra atado por las cosas. Ahora
bien, las cosas no pueden con el Cielo, largo tiempo ha que esto es bien
sabido; ¿por qué, pues, habría de estar enojado?».
Poco después fue Zilai el que adoleció. Su respiración entrecortada, a
pique estaba ya de morir. Su mujer y sus hijos lloraban a su alrededor. Zili
fue a visitarle y les dijo: —«¡Apartaos! ¡No hay para qué provocar temor a
quien va a transformarse!»."
Ahora mismo no estoy leyendo nada que me entusiasme demasiado, creo que ya van cinco libros seguidos que he abandonado, así que os agradezco mucho todas las recomendaciones de este hilo.
¡Saludos!