Recientemente se han publicado los pilotos de exámenes que contempla la nueva ley educativa para el acceso a la Universidad.

Con anterioridad, nuestra disciplina se centraba en el estudio de 8 autores, de entre los cuales se preguntaba un problema (realidad, conocimiento, ética o política) junto a un comentario de texto de una obra extraída de los mismos.

El nuevo modelo plantea un cambio radical: la incorporación de un gran número de autoras -algunas de las cuales sólo tenemos conocimiento por testimonios-, el análisis de imagen y la presencia de criterios estéticos en la resolución de los exámenes.

Dejo aquí el piloto y comentamos, si os parece, impresiones:

www.slideshare.net/20minutos/examen-de-l...ctividad-de-filosofa

YO ME EXAMINO EL DIA 15 Y ME ENTRA PLATON DESCARTES NIETZSCHE Y ORTEGA Y GASSET,ah y kant.
Eso en andalucia.
Este examen piloto no se de que comunidad es
pero aqui (Andalucia) no lo hay aun

Heráclida escribió:
Al primer vistazo no me ha disgustado... Parece más un intento de hacer Filosofía que Historia de la filosofía, y por lo demás los textos que selecciona (Russell, Arendt) parecen buenos y con la chica suficiente como para que quien haya aprovechado el curso pueda construir un buen comentario. Lo de las imágenes me ha dado miedo a priori porque tiene potencial para la chorrada o para el subjetivismo de UTA, pero no me parecen tampoco mal elegidas, al menos las del ejemplo... Y las preguntas ayudan a centrar un poco el análisis y que no se vaya uno por los cerros de Úbeda. Cualquier alumno algo despierto puede colar referencias a la caverna platónica subvertida en la primera imagen y a la epistemología kantiana en la segunda...

En cuanto a los cambios respecto a las nuevas autoras incluidas no me puedo pronunciar porque no encuentro exactamente a cuáles te refieres o qué peso tienen en la asignatura.

En general, tengo la sensación (no solo en Filosofía sino en todas las asignaturas y todos los niveles) de que no se ha alcanzado aún un equilibrio entre modernización/accesibilidad y profundidad. Es como si el hecho de modernizar la evaluación y acercarla a la vida real se perdiera profundidad, cuando NO ES NECESARIO que eso ocurra. Por poner dos ejemplos de nuestro Grado que entenderá enseguida quien las haya cursado: IPC se pasa de moderna y Ética se pasa de antigua.

También he ido a buscar a ese elenco de pensadoras. No las he encontrado. Mi curiosidad había sido realmente tentada con ese examen piloto. He sobrevolado los dos textos y las imágenes y me he quedado enganchada en la del rinoceronte. Igual que Lapidario, me ha sugerido la Caverna de Platón, fácil, siempre cae en las pruebas de acceso, hace muuuuchos años, en una lejana Galaxia, ya me cayó a mí. Después he pensado en Jenófanes, perteneciente a la escuela de Elea y su denuncia del antropomorfismo, en su caso en la proyección de “nuestros dioses” y creo podría servirnos en relación con el conocimiento, sujeto mediante, para comentar el dibujo propuesto, al que podríamos poner el título “ver más allá de nuestras narices”.

Esto decía Jenófanes “Si los bueyes o los caballos o los leones tuviesen manos, o pudieran dibujar con ellas, y realizar obras como los hombres, dibujarían imágenes de dioses parecidas a las de los caballos, los bueyes parecidas a las de los bueyes, y harían los cuerpos de los dioses cada uno tal como tiene el suyo […]"

Meses antes de examinarme, en mi caso de selectividad, mi profesor de historia nos puso en el examen global una viñeta en la que salían bailando Hitler y Stalin para que la comentásemos. Representaba el Pacto alemán-soviético de 1939. Dio para escribir mucho, la propuesta me resultó audaz entonces.

Mucha suerte pacopérez, y si decides jugártela, no descartes a Platón. Es ineludible.

Las autoras son: Aspasia de Mileto e Hipatía de Alejandría, Hildegarda de Bingen, Mary Wollstonecraft y Olympe de Gouges, María Zambrano y Hannah Arendt

Considero que hay dos dimensiones esencialmente distintas: una, lo interesante que pueda resultar el ejercicio; dos, las implicaciones profesionales y personales tanto para el profesorado como para el alumnado.

Acerca de lo primero, desde luego, es un ejercicio filosófico precioso. Comentar viñetas, exponer puntos de vista, leer y comentar de una manera más libre son algunos de los ejemplos por los que puede decirse que es una prueba estimulante.

Sobre lo segundo, tengo muchas dudas. En primer lugar, es una gran faena para los profesores, pues se han doblado los autores y se ha reducido una hora semanal la enseñanza de esta asignatura, además de haber añadido ejercicios adicionales.

Al margen de esto último, que no es poca cosa, a mí me impresiona que hayan introducido a autoras de relevancia significativamente menor que autores sólo por aquello de la cuota de género. Al margen de la escasez de fragmentos de Hipatia o Aspasia, me sorprende que hayan introducido a Hildegarda de Bingen antes que los helenistas, Spinoza, Hegel, Schopenhauer, Heidegger, entre otros muchos. No es que me parezca mal la presencia de autoras femeninas en la selección, pero que el criterio esté contaminado por ideología me resulta preocupante, especialmente en una especialidad como la nuestra.

Por otro lado, no sé si un alumno tiene la capacidad como para responder solventemente a esas cuestiones. Entrenar destrezas lleva mucho más tiempo que contenidos. Yo supongo que los criterios de corrección, o lo esperable del examen, sea más cuestiones formales que conceptuales. Yo, en la imagen del pintor, puedo extraer distintas lecturas: el perspectivismo de Ortega, el problema del cambio en los presocráticos... No creo -ni tampoco espero- que se busque una respuesta definitiva, sino bien argumentada.

Uf, pues a mí en cambio me faltan muchas más: Simone de Beauvoir, Simone Veil, Judith Butler, Teresa Oñate...Quiza en una mirada hacia atrás de siglos, la presencia de la mujer sea mínima, dadas las escasas posibilidades de estudio que se les concedia, sin embargo, en el s.XX y XXI te sale una antigua guía de teléfonos de páginas amarillas, con ellas. Es preciso traerlas, las chavalas tiene que encontrar sus referentes tanto en filosofía, como en literatura, ciencias..., urge hacerlas emerger, son una auténtica potencia.

Entonces, también habría que buscar filósofos negros y homosexuales para que haya diversidad y todos los alumnos puedan identificarse con ellos según su raza, género u orientación sexual, y no por la calidad de su obra.
En fin, me parece un despropósito. Habría que poner en valor la obra de mujeres que hayan podido ser invisibilizadas por su condición de mujer, claro, pero dado que la mayoría de grandes filósofas se han dado en los últimos tiempos, no han sido discriminadas por ello y su obra debería competir en igualdad de condiciones con la de cualquier filósofo varón. Que el sexo sea un parámetro con el que evaluar un autor determinado con el fin de ser enseñado, y no sus propios méritos, me parece un poco triste.

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Creo que las filósofas citadas han producido obras de gran valor. No se trata de competir, sino de ampliar la mirada.

Podemos aprender del tirón la historia de la filosofía y vomitarla en un examen o desarrollar diferentes aspectos filosóficos desde diferentes áreas: del conocimiento, de la ética, la política, la existencia humana, la ontología... a partir de la lectura de la obra de distintos pensadores y pensadoras.

A los chavales claro que les interesa la filosofía, es la experiencia que yo tengo, solo hay que servírsela de forma atractiva, la imagen, las redes sociales, son una competencia feroz, pues habrá que adaptarse para llegarles

Yo no puedo hablar con propiedad del examen de Filosofía, porque no soy profesor de esa materia. Yo soy profesor de Lengua castellana y Literatura y en mi gremio, por lo que he podido catar, hay bastante descontento.
En todo caso, sí diré alguna cosa. En primer lugar, me parece un despropósito y una labor contraproducente equiparar a las filósofas y a los filósofos de los tiempos pasados, al menos hasta el s. XX (y con muchos matices). Eso da la idea de que las mujeres siempre han podido escribir, filosofar, cuando era una labor que ha estado restringida a muy pocas hasta épocas muy recientes.
En segundo lugar, hemos de tener en cuenta que en 2ª de Bachillerato se estudian contenidos que para el especialista pueden resultar muy evidentes, muy básicos,no así para el estudiante, que tiene muchas otras materias, todas importantes. Se estudia lo esencial. ¿Se debe olvidar a Spinoza para hablar de Aspasia de Mileto? El tiempo es limitado. Si se incluye algo se quita otra cosa, y si las horas de Filosofía disminuyen, con más razón.
No estoy en absoluto de acuerdo con que el alumnado actual esté menos preparado para la filosofía que los alumnos de nuestra generación; quizás hayamos olvidado en qué punto estábamos nosotros cuando teníamos 17 años. O nuestros compañeros de Instituto. La primera vez que di clase me horroricé al ver el poco espacio que se le dedicaba en los libros de texto a la Generación del 27. Cogí mi libro de texto del instituto y me di cuenta de que era exactamente igual.
Yo siempre soy tutor de alumnos/as en prácticas, recién salidos de la Facultad. Hay algo que siempre les digo. Acabáis de salir de la Facultad, que tiene un nivel de exigencia muy superior al Bachillerato y una especialización también muy superior. Hay que situarse en el lugar de ellos. Nuestros alumnos no son ni más cultos ni más incultos que nosotros, aunque haya habido un cambio generacional debido a los cambios sociales y tecnológicos.
La base es lo fundamental en cualquier materia. Butler se remonta a Hegel y a Nietszche y a Freud y a Heidegger y a Lacan y a Foucault. ¿Podemos hablar de Butler sin hilarlo con lo anterior? Yo lo veo difícil.
En Literatura no me parecería bien dejar de estudiar a Cervantes o Fray Luis para estudiar a Sor María de Ágreda. Por importancia, por belleza, por la influencia en la literatura posterior, etc. Y eso es fundamental. No se pueden vender historias de la filosofía o de la literatura falsas. Si las mujeres no estaban allí es porque no se las dejaba estar allí. Eso es lo que hay que explicar y no que escribían en igualdad de condiciones que los hombres. Una paridad que no existía. Y esa es la verdadera labor de la educación en igualdad, no hacer creer al alumnado que en su día tuvieron la libertad de escribir como Platón.
En lo de las viñetas, no me meto porque me pierdo.