Alma, compañera..(en otra época compañera)..
Leer a Santa Teresa te puede aportar un poco de “
Pedro-Sanchismo” del siglo XVI..”La paciencia todo lo alcanza”... pero después, era como
el bicho del pantano con aquel que se interpusiese en sus intereses… Preguntáselo a Doña Ana de Mendoza.
Viviendo en Pinto, entenderás que sea un “FanBoy” de la Princesa de Éboli.
Lo que te puede “aportar”, no son sus escritos… que mientras los lees suenan violines tocados por querubines y piensas: Joder, que maja ¿no?, que adelantada “pá su época”.
Vamos, una
underground típica del misticismo….Sino su biografía puesta en contexto..
Aún así, a pesar de su biografiá de malota..
Esas yemas de Santa Teresa que me “jinco” cada vez que visito Avila, no tienen precio y esas imagines, casi pornográficas, que inspiraron a maestros como Bernini, tampoco..
Si, lo confieso voy camino de ser un viejo verde y cuando visité la iglesia de Santa Maria de la Victoria, no pude mas que quedarme
“to picueto”