¡Esas pequeñas trampas de la vida cotidiana! Por ejemplo, cuando buscas la fecha de caducidad en algunos alimentos. “Consumir preferentemente antes de Ver envase”. Sobra decir que a cualquier filósofo del lenguaje se le hace el culo Pepsi Cola con estos enunciados que se pueden interpretar, al menos, de las siguientes formas:
1. Según el Pragmatismo, habría que buscar en otro lado del envase la fecha de caducidad. Digamos que sería la opción socialmente aceptada.
2. Desde el punto de vista de un literalista o un denotacionista, tendríamos que ir al Carrefour con los ojos cerrados para poder ver la fecha de caducidad antes de ver el envase. Pero a partir de aquí, coincidiría con
3. El lógico. Nos diría que estamos ante una contradicción ya que no podemos ver la fecha del envase antes de ver el propio envase. Es decir, no podemos mirar y no mirar un objeto al mismo tiempo.
4. Algún físico. Aquel que nos dice que hay diversos tiempos y podemos aislar el tiempo de mirar la fecha de caducidad del tiempo de mirar el envase. Un T1 y un T2 que resolvería la contradicción.
5. El relativista. El tiempo es una construcción social y, por consiguiente, no es un hecho inevitable, de modo que sorprendentemente su postura coincide con la del físico..
6. El otro relativista. El constructo social no es el tiempo, sino la caducidad. En realidad todo está caducado y, si somos lo que comemos, también nosotros estamos caducados. Y al pensarlo, y siendo como somos lo que pensamos, estamos caducados, salvo que no lo estemos.
6. El deconstruccionista. Nos dirá que no hay que fijarse en la fecha de caducidad, sino en los márgenes de la caducidad, y en todo caso lo importante no es cuándo caduca el producto, sino cuándo no caduca.
7. El escéptico. Que un producto haya caducado no significa que el producto que tenemos entre las manos vaya a caducar.
8. El semiólogo. Aceptará todos los supuestos anteriores, pero añadirá que quizás se trate de un mensaje cifrado con el cual se comunican las industrias alimentarias.
Sobre el extraño método que se usa en los medicamentos para señalar la fecha de caducidad, a modo de bajorrelieve, hablaremos otro día.
Feliz martes!!!