Pedrobbbc escribió:
Podría parecer que digo la ética del Imperativo Catégorico, pero lo diré de otro modo. ¿La ética de quién? De ti, de mi, de las personas comunes que se supone se guiarían por un principio “no quieras para otro lo que no quieras para ti”. ¿Acaso hay que adherirse a la teoría de tal o cual autor? Es muy sencillo: la ética que parte del principio del respeto, como si dijera “quiero que me trates como yo te trate”. La ética de aquellos primeros acuerdos del Neolítico, cuando no había poder ni abuso, cuando había respeto, ayuda y pactos. Ya sé que no vamos a volver a las cavernas (yo no soy nostálgico de aquella supuesta armonía, que tampoco era tal) y que la vida es más compleja, pero la base es esa conciencia tranquila que puede sentirse feliz sin necesidad de aprovecharse de otros.
Pareces dar por sentado que hay una ética universalmente compartida por todos que no plantea problema alguno. Eso es muy ingenuo. La gente está en desacuerdo sobre muchas cuestiones morales, lo vemos todos los días. Unos creen que matar animales para comer está mal, otros que no; unos creen que el aborto está mal, otros que no; unos creen que burlarse de las creencias religiosas está mal, otros que no. Unos creen que pintarse la cara de negro está mal, otros que no. Lo bueno del liberalismo es que no pretende imponer una ética particular, sino crear las condiciones en que cada cual pueda perseguir libremente su concepción del bien.
¿Rawls? Una cosa es la ética de la teoría política, cuya visión de Rawls yo en buena medida sí comparto. Pero con frecuencia las teorías sirven para enzarzarse, embarrarse de modo pretendido y adormecer el movimiento…al final se traducen en poco que camine. Es cierto que a veces propician algunas políticas favorables, como la discriminación positiva y pocas más, nunca que toquen el núcleo principal: la pasta y la propiedad.
Rawls era un filósofo, no un político. Si nadie ha aplicado ciertos aspectos de su teoría que te parecen correctos, el problema no es de la teoría ni de Rawls, sino de los políticos.
¿Locke? Sí. Yo estaba pensando en el liberalismo político, en el origen del filosófico podemos coincidir en Locke.
No entiendo la distinción entre liberalismo político y filosófico. El liberalismo político es una teoría política que ha sido defendida por filósofos. No hay un liberalismo filosófico distinto del político.
Dices: “Si no me equivoco, el sistema económico que defiendes es un capitalismo con un Estado intervencionista”. Yo no defiendo ese capitalismo, pero hay una cosa que se llama “aceptación del mal menor, o adecuación al mundo real”. Yo no aceptaría el permanente statu quo ni que las estructuras de poder estén siempre en las mismas manos, que es lo que impone siempre el capitalismo. Mi visión ideal podría parecerse al modelo Kibutz. Pero soy realista: muy poca gente le quiere.
Y mi modelo ideal podría consistir en que todos pudiéramos lograr lo necesario para satisfacer nuestras necesidades solo con desarlo, pero lo importante no es lo que desaríamos, sino lo que pretendemos lograr (y lo que pretendemos lograr queda limitado por lo que creemos poder lograr).
Mientras haya listas Forbes, Lamborghinis, rolex de 30 mil euros, casas de 7 millones, Sicav y Socimis, no encuentro razón para creer algo de lo que diga el liberalismo. Los liberales creen en la igualdad derivada de lo que ellos entienden por libertad (la derivada del poder de compra). En base a ello, muchos podrían entender que tienen derecho (tú te lo eliges y te lo costeas) a irse de vacaciones a la Antártida (estos días he oído sobre ese inicio de moda). Yo creo que no. Igual que discrepo del principio de libertad de consumo que se traduce en la igualdad del IVA, porque es una igualdad Ficticia
¿Porque uno no va a poder ir de vacaciones a la Antártida si puede pagar el viaje? Lo que habrá que impedir es que se obtenga ese dinero abusando de otros. Tampoco creo que nuestro objetivo tenga que ser impedir que haya ricos, sino que lo que debemos hacer es impedir que haya pobres. El objetivo no ha de ser buscar el máximo de igualdad, sino buscar que nadie se sitúe por debajo de cierto nivel que sea suficiente para llevar una vida satisfactoria.