Amigo Herxeo,
voy a permitirme una contestación poco ortodoxa a tu mensaje. He de comenzar felicitándote pues en un principio me convenciste a leer tu éxtasis creativo. Entré en tu blog, abrí el primer pdf y comencé a leer decididamente.
A la cuarta hoja, me di cuenta de que no tenía una motivación real para seguir leyendo. Y no porque tu escritura no fuese suficientemente amena, que lo es, sino porque me pregunté a mi mismo de qué hablabas y no me supe contestar.
Vivimos en una sociedad en la que se premia la estimulación, la sobre-estimulación. Es decir, 500 canales de tv, internet, millones de posibles actividades con una continua estimulación, así como un exceso terrible de ideas y desarrollos que leer sobre cualquier tema imaginable. Y sólo hay una forma, por ignorante o ridícula que os pueda sonar, de llamar la atención de tu público, y se llama impacto.
Amigo mío, la "importancia innecesaria" puede ser un tema que nos intrigue, en lo cual nos puedas iluminar una vez tengamos esa intriga, y entonces tal vez nos motivemos a leer todo tu ensayo.
Fíjate ahora en que todos los temas de este "ágora" tienen respuesta salvo el tuyo.
No pretendo que te lo tomes a mal, de hecho, admiro tu determinación hacia este tema, y apremio tu esfuerzo en escribir, pero te olvidas de lo más importante. La biblia se escribió porque había gente que creía en ello, que discutía sobre ello. Estaba ahí fuera, en la sociedad.
Un saludo compañero.