Xna escribió:
Un gran trabajo, Lapidario. He de protestar amargamente. Nos hiciste trampa. Al equipo docente les has ido preparando con maestría para la contemplación, si no han hecho como yo, leer y luego ver las fotos, (quizá yo hubiera aprovechado más alternando lecturas y acudiendo a las fotos pero soy una tragaletras). Eso no ocurrió en la encuesta con la gente del foro, nos soltaste ahí a pelo, provocando un montón de estridencias, te debiste reír mucho con nuestras reacciones.
Muchas gracias, Xna!
Jaja, siento haberos usado de conejillos de indias, os lo agradezco mucho. Durante muchos años he ido siempre con mucho cuidado cuando a amigos, conocidos o público de charlas les introduzco imágenes o temas BDSM… Sé que son imágenes muy fáciles de malinterpretar y que además pueden despertar asociaciones de ideas desagradables. Por eso primero les suelto la chapa sobre lo de sensato, seguro y consensuado, palabra de seguridad, negociación de deseos mutuos en pie de igualdad, etc etc. Pero claro, si hacía lo mismo en la encuesta perdía la posibilidad de comprobar empíricamente si hay o no diferencia de puntuación estética entre quien tiene los códigos de comunicación y quién no. En realidad el experimento chulo hubiera sido comprobar si la puntuación estética de algunas imágenes varía DESPUÉS de haber sido introducido en los códigos comunicativos, pero eso era más complicado de hacer.
Las reacciones fueron muy chulas, tanto las críticas como las que no. Me gustó mucho una respuesta (no sé si de este foro o de las redes) sacando interpretaciones sociales de todas las fotos: la del modelo negro una alegoría de la esclavitud, la de las cuerdas en la cara un símbolo de la incomunicación y así. Eso me dio la idea de añadir la foto de la mujer atada en un vestido de novia, que esa sí estaba pensada directamente (hasta donde yo sé) con una sublectura directamente feminista. Todo eso me recordó un librito muy chulo de Umberto Eco, “Interpretación y sobreinterpretación”, que menciono en el trabajo al hablar de la foto de la mujer “abandonada” en el bosque. Viene a decir que la “intentio auctoris” de una obra es poco importante (por lo que sabemos, podría ser un simple testimonio de una sesión que tuvieron en un picnic), la “intentio lectoris” amplísima, sobre todo en quien no era de la comunidad SM (hay quien vio una violación con asesinato y quien vio una agradable tarde de sexo al aire libre) y es la “intentio operis”, la intención de la obra en sí, la que marca los límites de las interpretaciones (y donde creo que entraría el contexto de conocimiento de las prácticas BDSM). Lo que quería comprobar es hasta qué punto la interpretación del lector se dispersa sin referencias contextuales… Y la respuesta es mucho.
Vamos, que lo dicho, muchas gracias por las respuestas a todos.
Xna escribió:
Tras conocer mas el Shibari cambia totalmente la comprensión de esas imágenes aunque sigo en mis trece, las de la mujer con traje de flores caminando hacia el lago helado o sentada allí mismo y derritiéndolo con "su calor" son bellísimas.
Es una maravilla de imagen: de hecho es la que ha salido mejor puntuada en media estéticamente (la de mayor puntuación visceral ha sido la de la japonesa con hazukashii, vergüencita victoriana a mostrar la propia excitación sexual).
Xna escribió:
He podido escuchar el deslizar de las cuerdas por la piel, el golpear con ellas el tatami (atraída por la sensibilidad auditiva fundamentalmente).
Hay varios atadores que cuando hacen performance públicas insisten mucho en NO poner música, precisamente para que el ruido de las cuerdas, algún gemido momentáneo o los roces con la ropa o la piel sean lo único que se oiga. Otros ponen música electrónica a todo volumen… Depende un poco del estilo de atadura que estés haciendo, la división esa entre “acariciante” y “de ataque”.
Xna escribió:
Me ha gustado mucho esa comparación entre las distintas caligrafías, firmes, fluidas... y los nudos, también la importancia del proceso más que de la forma final y, cómo no, la mención al "ser en el pueblo" (o "del pueblo", no recuerdo bien) vs "Ser ahí" (esta cabra encapuchada tira al monte) porque hay una espacialidad y una temporalidad específica. Hay un término en Heidegger que estoy rastreando en Simone de Beauvoir a ver hasta dónde me lleva, "Mitsein" o "estar con", "coestar", existenciario que expresa la relación que el Dasein mantiene constitutivamente con otros en cuanto estar-en-el-mundo y con el que Heidegger rechaza las ideas de "yo", "sujeto", "conciencia" como regiones aisladas e idénticas, impermeables a los cambios de comportamiento y vivencias. No es posible la existencia de un yo aislado sin los otros con los que se comparte el mundo. Quizá a partir de este término podamos meter al alemán en la comunidad o mejor le dejamos fuera, bastante brasa estoy dando yo por ahí con el hilo, cada mochuelo a su olivo.
¡Oh, qué interesante! Jeje, suponía que a una heideggeriana como tú le haría gracia el párrafo en que un japonés se mete con él por ser poco comunitarista y no tener en cuenta el “ser en un pueblo”. Por cierto, el filósofo que se lo recriminaba se llamaba Kuki, tenía que resistirme para no llamarle Cuqui que hubiera sonado más apropiado para un filósofo estético. Qué interesante lo del “Mitsein”, no sabía yo que tuviera un punto constitutivo de relación con los demás, simpoiesis que diría la Haraway supongo. Metamos a Heidegger en el ajo, metámoslo, nunca sobra un alemán más en una fiesta.
Xna escribió:
Relacionar la práctica con las categorías de la estética modal de Claramonte me la ha hecho más reconocible, es una senda por la que también transité el año pasado y me ha traído de nuevo mi trabajo, una experiencia la asignatura de Estética, altamente recomendable.
Lo que me encanta del análisis modal y de la división de estratos de Claramonte es que se puede aplicar a un montón de fenómenos artísticos para entender su evolución. Desde que lo he leído estoy como un niño con un juguete nuevo, intentando probarlo en todas partes: cine, youtubers, literatura clásica, poesía, cómics de superhéroes. Una pasada.