Después de haber dado alguna vuelta al manual, os dejo mis impresiones, a pesar de que me llevaré alguna colleja:
- El manual me parece excelente, de esos libros que debe haber en tu biblioteca filosófica. Le hecho en falta algo de introducción en algunos autores, en los que se empieza sin o con poca previa.
- Pero el hecho de que me parezca excelente no significa que lo haya entendido perfectamente. No creo que el manual sea indescifrable o incomprensible, es que del tema sabemos bastante menos que la persona que lo escribe.
- Es muy extenso y muy denso, pero trabajándolo se lleva a buen cauce. El problema es que para trabajar todo el manual con la profundidad que requiere es imposible en un semestre, es necesario dedicarle un curso entero a razón de 10h/día, lo que no es factible. También me he dado cuenta de que se repite mucho en determinadas cuestiones a lo largo del libro, se le podrían quitar 100-150 páginas en una buena revisión, pero a saber qué tiempo ha de invertirse en ello.
- La primera parte, incluyendo hasta la hermenéutica de Heidegger y donde empieza Gadamer en la pág. 452, es bastante más dura que la segunda.
- No aconsejo los apuntes de otros, sino pelearse con el manual, yo me he hecho algo de apuntes a mano y considero que los hechos por otras personas me hubieran hecho perder más el tiempo.
- No es factible que uno se quiera presentar en febrero habiendo entendido a todos los autores y llevando de lujo todo el libro, sólo si te dedicas 100% a esto o eres un ser situado en la parte alejada de la distribución normal.
- Otro problema añadido es que muchas veces las diferencias entre los autores, sobre todo los de la primera parte, son muy sutiles y cuesta desgranarlas.
El problema de la asignatura no me parece que sea el manual, sino el tipo de examen: 1 pregunta teórica -sin posibilidad de elegir- y 1 comentario de texto a elegir entre dos. En caso de dejarte algo, aunque sea un aspecto concreto de un autor, es muy fácil que salte la banca.
Como cuando iba por Merleau-Ponty me di cuenta de que no era posible presentarme al examen entendiendo todo, decidí tomar atajos -ya los comentaré en su momento, cuando tenga algo más de tiempo-, a sabiendas de que es una ruleta rusa.
Ya veremos qué pasa en el examen, voy a la segunda semana, y por temas laborales no estoy teniendo mucho tiempo de dedicarle más profundidad en estos días, así que me conformo con repasar ciertos temas concretos. Y si no se puede, pues a septiembre.