El que ha llegado a cuarto, o incluso tercero, sabrá de lo que hablo. Harto de comerme tremendos mojones de asignaturas, como la infame filosofía política II en el año que hicieron examen tipo test, las HGC o las AF, decidí no pasar de nuevo por la angustia del atropello a la que determinadas materias nos someten.
Por esta razón, a la luz de las asignaturas convalidables entre grados, decidí matricularme de Historia de la Filosofía Moderna y Contemporánea del grado de Geografía e Historia. Tuve que pagar más dinero: la apertura de expediente y un crédito extra. Pero no me importaba, pues ya, viniendo de otra carrera, estaba cansado como para seguir cogiendo luchas titánicas con manuales enormes, ilegibles, de los cuales sólo te preguntan un epígrafe; y, sino, a septiembre (o a una segunda matrícula).
Afortunadamente, la asignatura de Historia de la Filosofía Moderna y Contemporánea la lleva Escudero, con lo que se convierte en una suerte de TC II, con buenos materiales, muy asequible, y con una visión que rebasa el enfoque monotemático de CAF I versado en la fenomenología, que era lo que más me disgustaba. Además, las notas de Escudero van acordes al esfuerzo: no son pocos los testimonios de grandes esfuerzos por estudiar CAF I y acabar con un 6 o un 8. La he convalidado con una MH.
Ahora bien, he renunciado a conocer a autores que no aparecen en otras asignaturas. No he estudiado a Husserl en profundidad, tampoco a Heidegger más allá de las ideas básicas; no he conocido ni siquiera a Bergson, los fenomenólogos o hermeneutas como Sartre o Gadamer. También he de decir que tampoco un manual tan desastroso, que precisa de una significativa reducción eidética, me hubiera aportado mucho. Temo que todo se agotara en la memorieta.
Una última cosa. Si decidís hacer esta jugarreta, no lo hagáis el año en el que hagáis el TFG. Para hacer el TFG, has de matricularte de todas las asignaturas que te falten, por lo que habrás de pasar por caja por dos: pagar CAFI, Historia de la Filosofía y la apertura de expediente. Los de Secretaría son unos Aichmanns cuadriculados: a pesar de haberles comentado esta situación, que al ser convalidables ambas asignaturas daría igual matricularme de una o de otra para cumplir con el requisito del TFG mencionado, me dieron calabazas y una patada de regalo, haciéndome pagar el doble. Estos secretarios habrían sido los primeros en pulsar el botón del gas si así lo dictaba la norma; en su cabeza, significado y significante van bien pegaditos, no hay espacio entre ambos.
Eso es todo. Cualquier duda sobre este proceso, aprovechad este hilo para preguntar. Un abrazo, arjeanos.