Hola Zolaris
Le he dado vueltas a tu mensaje para contestarlo pero, como me está ocurriendo con mi trabajo de Estética II, del que me quedan escasos días para presentarlo, he embarrancado y la culpa no es de tu mensaje ni de Estética II sino del mar y el sol y de tener que ponerme otra vez zapatos.
Sí, pensamos en modo moderno porque así se ha conformado nuestra mente y pasa por el utilitarismo y la generalización, buscamos lo común o general con vistas a lo práctico, lo útil para nuestras necesidades, priorizamos la realidad frente al pensamiento y hacemos representaciones en base a nuestras facultades cognitivas. El sujeto en Aristóteles es aquello que aparece y sobre lo que se predica no el individuo pensante. Aristóteles pasa por Roma y por las especulaciones de las religiones creacionistas, también por Kant y la modernidad y su legado nos viene interpretado y transformado y parece ser que muy distinto al Aristóteles griego. De entrada, el propio orden de los tratados de su Metafísica no responde a la disposición de sus lecciones. He estudiado la asignatura de metafísica este año y pensé que era prioritario leer la de Aristóteles pues, de lo contrario, no sabría qué es eso sobre cuyos escombros Francisco Martínez abordaba el temario. Así que me dispuse a ello y abrí una puerta que siempre estuvo allí y que, entre tú y yo, me la soplaba, y me asomé por un resquicio para fascinarme con la magnitud de la empresa y ahí estoy plantada y animada a adentrarme.
Zolaris: Aristóteles: "el alma es en cierto modo todos los entes". ¿Qué te parece, Xna? ¿No es esa afirmación más moderna que griega? Como he leído recientemente en un estudio de Ramón Rodríguez, eso conecta legítimamente con Kant y con el idealismo. Ahí está el sujeto cognoscente de la modernidad. Ahí está el "a priori" kantiano
Es que “ente” es ya una palabra latina con la que se traduce el participio “lo que es” (to on) del infinitivo “ser” (einai). En el libro Gamma habla de la ciencia del “ser” para pasar inmediatamente a “lo que es”, es decir, el uso que hacemos del verbo ser para indicar algo que es y eso se dice en muchos sentidos. Ser también lo usamos para determinar qué es veradero o falso y finalmente para identificar ser en potencia y en acto. Ésta es la puerta de acceso a una ciencia que lo es de los primeros principios y las primeras causas de todo, la filosofía primera, distinta de las ciencias teoréticas (Aristóteles) que estudian lo inmóvil no separado de la materia (matemáticas), lo móvil separado (física) “en cambio a la filosofía primera concierne realidades que son separadas e inmóviles…” “… ahora bien, es necesario que todas las causas sean eternas” pues las causas primeras, si lo son de todo y de todo lo que ocurre en cualquier tiempo deben existir siempre y por tanto ser eternas, es decir, “las causas de los seres divinos que a nosotros nos son manifiestos” y mira la importancia de pensar en la Cultura antigua de Grecia, entre otros muchos ejemplos, pues para un griego antiguo los seres divinos manifiestos eran los astros, las estrellas, el sol, la luna ¿es la teología la otra rama de las ciencias teoréticas para Aristóteles?, no, ese aspecto de la ciencia primera que lo es del conocimiento de todo es teológica pero no una teología porque para Aristóteles la teología eran los mitos narrados por los poetas sobre los dioses, aquí estamos hablando de una ciencia que es teológica porque tiene que vérselas con lo “divino” pero no es teología pues no se ocupa sólo de “realidades divinas” sino porque éstas también están entre las causas primeras que son de cuatro tipos: material, formal, eficiente y final y esta ciencia busca todas las causas primeras.
¿El lenguaje más importante que la verdad? Esta ciencia habla del ser para inmediatamente dividirlo. Ser y uno son predicados universales de todo, pero no dicen nada, debemos proceder a su inmediata división para ver qué es eso que se predica de las cosas que son y lo primero que se predica es la ousia (determinado y separado) y de ella se dice lo que la constituye y su definición (diferencia específica, forma), física y logos, por eso no separamos pensar de ser. Luego vendrán los géneros, las especies y un mogollón de cosas más. Lo que constituye y su definición en un proceso sistemático de división. Te diría que ya lo tengo hilvanado pero es mentira siquiera he enhebrado la aguja aunque la cosa promete. ¿Y estética II? ¡¡ya voy!!, ya está casi o no. No me adapto ni a la ropa ni a los zapatos vengo de “ser brigada” (León Benavente)
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